Entrar a la educación superior no es tarea fácil. Implica muchos cambios y, a veces, tomar decisiones apresuradas, por ejemplo la elección de la carrera que estudiarás (mira aquí cómo elegir). Cada año, hay cientos de estudiantes que abandonan sus carreras, así que si eres uno de esos, no te desanimes: no eres el primero y tampoco serás el último en hacerlo. ¿Estás confundido y no sabes si la carrera que elegiste era la correcta para ti? A continuación te dejamos 10 señales que -esperamos- te ayuden a aclarar tu cabeza.
1. No te gusta ningún ramo de los que has tenido
Está bien, es verdad: a todos nos ha pasado que algún ramo no nos gusta. Pero si esto te sucede con absolutamente todo los ramos que has tenido es porque, posiblemente, la carrera que elegiste no es para ti.
2. Ir a clases te parece un terrible
Levantarse temprano para ir a clases no es ninguna maravilla. Nos da sueño y muchas veces preferiríamos quedarnos acostados durmiendo, pero al final, uno hace el sacrificio porque le gusta la carrera que estudia. Si no eres capaz de ir a clases porque te parece terrible y hasta te pasan cosas corporales como vómitos, es porque la carrera que estudies puede no ser la indicada.
3. Te cuesta mucho entender los ramos
No todos los ramos son fáciles, lo sabemos. Algunos cuestan más que otros, pero si todos, o la gran mayoría, te es muy difícil de entender es porque existe la posibilidad de que la carrera en que entraste no sea la correcta para ti, ya que de lo contrario te costaría menos entender.
4. No quieres ejercer tu carrera
Tu meta por ahora sólo es recibirte de la carrera. No te imaginas ni quieres ejercerla. Tan sólo pensarlo te pone mal humor y te parece un infierno.
5. Sueñas con estudiar otra cosa
Quizá este punto sea el más claro para saber que la carrera que elegiste no es para ti. Si te pasas pensando en lo genial que sería estudiar otra cosa, evalúa abandonar la carrera. Imaginarte estudiando otra cosa te pone feliz y a dar saltos.
6. Te gustan más los ramos electivos que los de la carrera
Si tienes ramos electivos y elegiste ramos de otra carrera o área, de segura te gustan mil veces más que los ramos de tu carrera.
7. Te cuesta mucho estudiar
Tomas los libros o apuntes para estudiar y te da sueño inmediatamente. Estudiar se te hace mucho más difícil que al resto. Incluso puedes llegar a sentir dolor de estómago o de cabeza al saber que debes hacerlo.
8. Envidias carreras ajenas
Te juntas con tus amigos y te cuentan sobre sus carreras y tú te mueres de envidia, preferirías estudiar cualquiera de esas que te cuentan antes que la tuya.
9. Nada te motiva
Cuando decimos que nada te motiva, nos referimos a varios ámbitos de tu vida. Ya que si la carrera que elegiste no es para ti, probablemente nada te parezca interesante. Preferirías quedarte acostado todo el tiempo.
10. Los domingos te aflijes y no puedes dormir
Una reacción de tu cuerpo ante el estrés provocado por estar en una carrera que no te gusta, es que los domingos te aflijes porque sabes que al otro día debes ir a estudiar. Además, te cuesta muchísimo quedarte dormid@.