La cantidad de ofertas laborales acorde a nuestras expectativas, pueden ser tan diversas como los requisitos que contienen cada una de ellas. Por lo mismo, lo ideal es ajustar el CV de acuerdo a lo solicitado, actualizándolo e incorporando todas nuestras habilidades o conocimientos que se relacionen con lo ofrecido.
Pero, no es lo único que debemos cuidar. Tener un buen portafolio de trabajo es muy importante al momento de postular o asistir a una entrevista. Tal vez te has preguntado qué clase de contenido se debe incluir en éste. Comparto algunos que te pueden servir de guía al crear o actualizar tu portafolio.
1. Currículum vitae: hay empleadores que no tienen disposición para leer un CV eterno. Trata de que el tuyo no contenga más de 2 páginas y cuida el orden de la información, tus logros y credenciales académicas deben estar en un lugar visible y no al final del CV.
Tampoco permitas que tu currículum parezca un bloque de texto, puede que de sólo mirarlo sea desechado por el reclutador, luego de su agotadora jornada laboral. Equilibra el contenido con espacios en blanco.
2. Muestras de tu trabajo: al igual que con tu CV, el tipo de muestra que incluyas variará de acuerdo a la naturaleza del portafolio y campo de destino. Puedes adjuntar informes, fotografías y proyectos, entre otras alternativas.
Además del papel, también ten en cuenta la inclusión de formatos multimedia. Por ejemplo, si postulas a un empleo relacionado con el diseño, tienes una excelente oportunidad para incluir tus creaciones gráficas más relevantes.
3. Premios y distinciones: acá puedes agregar certificados o información sobre becas y premios obtenidos durante y después de tu periodo académico. No olvides incluir la fecha y el motivo de la distinción.
4. Talleres, seminarios y conferencias: incluye una lista de tu participación o asistencia a éstos, destacando dónde, cuándo y por qué se realizó, y de qué trató cada uno.
5. Servicio comunitario: si has participado en actos que vayan en beneficio de la comunidad o creaste una actividad con el mismo objetivo, no descartes la alternativa de agregar esa información. Puede ser una característica muy importante, especialmente si postulas a un trabajo relacionado con ese ámbito.
Por último, no elimines la elección de tener un portafolio digital. Para algunos reclutadores puede ser mucho más cómodo y atractivo que leer un par de páginas repletas de texto.
Imagen CC vía César Santiago Molina.