Pensemos. Si tenemos un trabajo con horario de oficina normal, o sea entre 8 y 9 horas, ya estaríamos trabajando 1/3 de lo que dura la semana, eso sumando las horas extra y los ratos en que seguimos trabajando del hogar, estaríamos calculando que más de la mitad de nuestro tiempo lo pasamos haciendo labores.
Lo anterior deja en evidencia lo fácil que es que un empleo se apodere de nuestra vida, aunque hay mucha gente que logra mantener el equilibrio. En cambio, si eres de los que de verdad cayeron en el abismo y no pueden salir, te será fácil reconocerlo. De hecho, acá tienes -- señales que demuestran que tu trabajo se apoderó de ti:
1.- Olvidaste cómo era la luz del sol
[caption id="" align="alignnone" width="600"] FOX / Via thesimpsonsforever.tumblr.com[/caption]
Tú hábitat natural es un cubículo en el que pasas gran parte del día. Ahora te convertiste en una especie de gárgola o vampiro, pero de cuello y corbata.
2.- Desayunas y almuerzas en tu escritorio
[caption id="" align="alignnone" width="600"] fastcompany.com[/caption]
No hay tiempo para ir a un restaurant o para almorzar en el casino de la empresa, simplemente tienes mucho trabajo que hacer (quizás no, pero te gusta pensar eso) y alimentarte no parará eso. Ah, por si acaso, está científicamente comprobado lo malo que es comer en tu lugar de trabajo
3.- No puedes recordar la última vez que cocinaste
[caption id="" align="alignnone" width="600"] Warner Bros. Entertainment / Via moviegifss.tumblr.com[/caption]
O en verdad, no puedes recordar la última vez que comiste algo decente. La comida rápida se transformó en tu salvación ¿Para qué perder tiempo preparando algo sano si puede destruir mi mente trabajando obsesivamente? Sí, claro campeón.
4.-Tus amigos ya ni siquiera tratan de contactarse contigo
[caption id="" align="alignnone" width="600"] The CW / Via tryplandfordumbass.tumblr.com[/caption]
Eres un caso perdido, no hay solución alguna para sacarte de la casa y mucho menos de la oficina. Como siempre te sientes con el compromiso de trabajar, tus amigos ya asumieron que no pueden contar contigo.
5.- Relaciones son una memoria vaga de mucho, mucho tiempo atrás
[caption id="" align="alignnone" width="600"] HBO / Via imgur.com[/caption]
No te da el tiempo para tener pareja, ni siquiera para tener citas express. Ni hablar del sexo, ya que llegas tan temprano a tu casa que tu funcionalidad es igual a cero. Si estabas emparejado al momento de llegar a una oficina, probablemente tu novia/novio te dejó en claro que no estabas poniendo atención a la vida.
6.- Sólo el café te mantiene en pie
[caption id="" align="alignnone" width="600"] Relativity Media / Via gifolas-cage.tumblr.com[/caption]
Como a todos en una oficina, en verdad...
7.- Incluso tu jefe se está preocupando por ti
[caption id="" align="alignnone" width="600"] mgur.com[/caption]
Imagínate, hasta tu jefe se comenzó a preguntar por qué te estás esforzando tanto. Al final, tú mismo te propusiste hacer las cosas de forma alocada. Tú crees que trabajas normal, pero ante los ojos del resto, te estás sobreexigiendo. Así que la próxima vez que te vean trabajando de esa forma, te obligarán a ver videos de Justin Bieber ¡NOOOOOOOOOO!
8.- Los videos de gente renunciando se han vuelto una biblia para ti
Comienzas a planificar la mejor forma de renunciar. Es como una telaraña que empiezas a tejer con más dedicación que un preso armando un plan de escape de prisión. "Algún día lo haré", te prometes a ti mismo.
9.- Cada día eres menos y menos tolerante con tus compañeros de trabajo
[caption id="" align="alignnone" width="600"] Lionsgate Entertainment / Via film-instant.tumblr.com[/caption]
Cada día toleras menos a tus compañeros de trabajo. En verdad, odias a todos. Básicamente porque tu humor de a poco ha sido devorado por eso que llamas empleo. Eres como una bomba de tiempo esperando el momento para estallar. En ese momento ¡Quedará la grande!
10.- Conoces horarios que ni siquiera sabías que existías
[caption id="" align="alignnone" width="600"] NBC / Via televandalist.com[/caption]
¿Hay vida a las 5 de la mañana de un día martes? WoW, pensé que automáticamente todos dormían. Pero ahí estás, despertando porque las preocupaciones del trabajo ni siquiera te dejan disfrutar de dulces sueños. Lo que nos lleva a lo siguiente.
11.- El trabajo te persigue hasta en tus sueños
[caption id="" align="alignnone" width="600"] media.giphy.com / Via sempeternal.tumblr.com[/caption]
Hasta en tus sueños apareces en la oficina redactando cosas de último minuto o sintiendo la presión de los administradores. Ya ni siquiera sabes qué es real y qué no.
12.- Beber ya no es entretenido, es terapéutico
[caption id="" align="alignnone" width="600"] CBS / Via happyholidayhungergames.tumblr.com[/caption]
Así es, ya no sales a tomar por diversión y para tomar con tus amigos, es simplemente una MALA terapia para olvidar lo terrible que es tu vida con el actual trabajo que tienes.
13.- No hay forma de que puedas hacer más trabajo
[caption id="" align="alignnone" width="600"] L Studio.command / Via hulu.tumblr.com[/caption]
Excepto que lo haces, porque debes. Así de mal, ya no puedes atribuirte una tarea más pero la empresa te obliga a hacerlo ¿Cómo lo haces? Encomendándote a cada posible dios.
14.- El computador es tu único hobby
[caption id="" align="alignnone" width="600"] MGM / Via iwdrm.tumblr.com[/caption]
Olvidaste cómo divertirte de otra forma ¿Qué haces al llegar a tu casa? Sentarte frente a tu computador a "pasarla bien" un rato antes de acostarte, aunque finalmente terminas revisando el mail del trabajo.
15.- Finalmente, no te queda más que agradecer que, por lo menos, tienes un trabajo
[caption id="" align="alignnone" width="600"] 20th Century Fox / Via wifflegif.com[/caption]
Fuente: Buzzfeed
Foto CC vía Flickr