Gimnasia Laboral: beneficios productivos y personales

En nuestra actualidad, ya son muchas las empresas que han adoptado la gimnasia laboral como parte de la rutina diaria de sus trabajadores, ya que se han dado cuenta de la utilidad que este espacio genera para el mejor rendimiento de ellos, generando, a largo plazo, un nivel mucho más alto de productividad.

Según expertos, la importancia del ejercicio físico es fundamental para un mejor bienestar, tanto individual como grupal, por tanto, el seguimiento de rutinas de 15 a 20 minutos, encabezadas por profesionales del área, al comienzo o al término a la jornada laboral, es una instancia cada vez más seguida en nuestro país.

Los beneficios de esta iniciativa son variados: combatir el estrés y el cansancio mental, además de evitar el sedentarismo, que muchas veces provoca el trabajo administrativo de gran parte de las empresas, aportando, además, en la construcción de un ambiente laboral mucho más armónico y grato.

La gimnasia laboral de originó en Polonia, en 1925, en donde era conocida como “gimnasia de pausa”, utilizada especialmente para obreros en trabajos de fábrica. Luego fue expandida hacia Holanda y Rusia, y en la década del 60 se llevó a cabo en Bulgaria, Alemania, Suecia y Bélgica, incluso en Japón existió una obligatoriedad de Gimnasia Laboral Compensatoria.

El objetivo principal de esta práctica apunta a que el trabajador alcance un acondicionamiento adecuado para la labor que desempeñará a continuación, ya que el inicio de la jornada laboral existe una descondinación entre los ritmos de la activividad y el organismo del individuo, que la gimnasia podría mejorar.

Así que si en tu empresa aún no se maneja esta actividad, no dudes en presentar esta iniciativa, sin duda podría generar beneficios tanto para la insticuión como para los propios trabajadores.