¿A quién no le ha pasado estar colapsado al final del semestre por todo lo que se tiene que estudiar? Seamos sinceros, la mayoría de nosotros trata de posterga el estudio lo máximo posible; por temas de tiempo o simplemente flojera. Pero la verdad es que acumular todo para el final no es una de las mejores ideas. Por eso aquí te dejamos 15 razones de porque es bueno estudiar todos los días un poco y darse de aquellos épicos maratones de estudio.
1. No pierdes el ritmo: agarrar un ritmo de estudio es algo difícil y que no pasa cuando esperamos el día anterior para prepararnos. En vez de desesperarte tratando de volver al estudio, ya lo tendrás interiorizado como parte de tu rutina.
2. No tienes que aprender todo de un día para otro: lo peor que puedes hacer es esperar a última hora para el estudio. Hay personas a las que les resulta este sistema- porque tienen nervios de acero-, pero la mayoría no da su mejor rendimiento a contrarreloj.
3. Si tienes alguna duda hay tiempo de responderla: típico que te pones las pilas el día anterior a la prueba y te aparece una duda gigante que es fundamental para rendir la evaluación. Pero obviamente el profe o el ayudante, no te va contestar esta pregunta a última hora. Si estudias a diario y te surge una duda tienes tiempo para contestarla o buscar la información necesaria.
4. No te lo memorizas: como estás repasando un poco día a día vas aprendiendo la materia y entendiendo de lo qué trata. No como si estudiaras la noche anterior y terminas tratando de aprender todo de memoria y tu cabeza te colapsa en medio de la prueba.
5. Estudias de a poco: lo bueno de estudiar todos los días es que puedes ir dosificando los contenidos que revisarás porque, no se trata de estar todo el día repasando. Una cosa a la vez.
6. Las pruebas o controles se te harán más fáciles: como estás estudiando a diario a la hora de las pruebas o controles manejaras mejor la materia y solo tendrás que hacer una repasada rápida para recordar.
7. Evitaras un mayor estrés: es bueno estudiar todos los días porque te va quitando el típico nivel estrés y desesperación que surge cuando no te organizas y no haces las cosas con el tiempo que requieren.
8. Te organizas mejor: logras crear un orden mental propio y así no tienes que estar pensado todo el rato en lo que se viene y en lo que tienes que hacer. Ya tienes un sistema que aumentará considerablemente tus horas productivas de estudio.
9. Después tienes más tiempo libre: ya estás organizado para el estudio y puedes aprovechar mejor tu tiempo libre. Si estudiaste toda la semana y tienes un control el lunes en la mañana, no te vas pasar el fin de semana completo sin dormir, ni descansar. Es el tiempo ideal para estar con tus amigos.
10. Entiendes mejor las clases: como vas al día repasando la materia se te hace mucho más fácil interiorizarte con la clase y captar lo máximo posible del contenido que expone el profesor.
11. Ejercitas tu concentración: al ponerte un orden de estudio diario, aprendes a usar tu concentración en los momentos que se requiera. Eso te servirá para aplicarlo en tu profesión cuando trabajes. Muchas personas terminan sus estudios y aún tienen problemas para dominar la concentración, sobre todo cuando están con otros compartiendo el espacio.
12. Controlas los niveles de ansiedad: hay personas inmunes a hacerse problemas, pero en la universidad me he encontrado con mucha gente del tipo que debe lidiar con altos niveles de ansiedad y no sabe cómo hacerlo. Si estudias todos los días, de apoco te vas quitando las cargas de encima y no estarás desesperado pensando en todo lo que tienes que hacer. Como te organizas mentalmente vas tomando las cosas una por una, sin explotar.
13. El final de semestre se hace más ligero: al ir al día con todas las clases y materias la llegada del final del semestre no es tan horrible, porque ya estás mejor preparado para enfrentarlo.
14. Generas hábitos de estudio: terminarás acostumbrándote a este sistema y te crearás ese tan necesario hábito de estudio. Una rutina que incorporáremos a nuestra vida y la necesitáremos para hacer que nuestro día este completo.
15. Aprendes con mayor profundidad: ahora de verdad estás entendiendo y aprendiendo lo que te pasan en tus clases. Muchas personas- como se aprenden todo de memoria-, luego no recuerdan casi nada de un ramo porque después de la prueba su cerebro elimina la información.