Como si tener que irse de la casa no fuera ya lo bastante traumático, miles de estudiantes deben dejar sus provincias cada año para partir a la capital a estudiar una carrera.
Me uno a este grupo que se ve obligado a dejar el cómo nido en una linda provincia (con aire puro), y a continuación les cuento lo mejor y lo peor de tener que hacer este cambio:
7 cosas que me gustan (que aprecio):
(Porque JAMÁS amaré esta ciudad XD)
1. Variedad de hobbies, talleres etc.
En Santiago encontrarás un montón de opciones para hacer en tu tiempo libre. Desde las tradicionales como Clubes de lectura, talleres de pintura y danza; hasta baile del caño, cursos de idiomas como coreano o ruso y más.
2. Vas a conocer gente muy variada.
A veces al ser de provincia se siente como vivir en una burbuja. Pero en Santiago se expandirán tus horizontes y conocerás todo tipo de personas.
3. Siempre habrá un lugar para comer.
Te das vuelta y ves una picada. Otra vuelta y un bolichito. ¡Jamás pasarás hambre!
4. Hay farmacias por todos lados.
Lo mismo que la comida. Lo más probable que es que cerca de tu U (o en la misma cuadra) haya al menos dos farmacias. Jamás morirás de dolor de cabeza.
5. Probablemente sigas viendo a tus amigos.
Santiago es el destino para estudiar de un gran porcentaje de gente. De modo que es muy probable que tus amigos de siempre sigan ahí para ti.
6. Vas a aprender a ser autosuficiente.
¿No sabías planchar? ¿Lavar ropa era un misterio para ti? ¿No sabes qué hacer para que te dure más la plata? ¡Ya no más! Aprenderás a llevar tu vida por ti mismo y a depender cada vez de menos gente.
7. Lo queramos o no, TODO está acá.
Y créanme que me duele admitirlo; pero viviendo en la capital, encontrarás de todo y eso incluye buenas oportunidades laborales una vez que termines tu carrera.
Ahora, la parte fácil. 7 cosas que ODIO:
1. Clima.
Santiago tiene dos climas básicos:
"¡Muero de calor"! (Desde Octubre a Marzo-Abril, más o menos) Y si no tienes un ventilador vas a morir de calor.
o "¡Muero de frío" (Desde Abril-Mayo hasta Septiembre, más o menos) Y si no tienes una estufita o un escaldasono, vas a morir de frío (Y ni hablar de que se te seque la ropa que acabas de lavar, podría tomar semanas)
2. Transporte público.
Es simplemente un asco, sobre todo a las horas peak: o sea, entrando o saliendo de la U. Si puedes ahorrarte el transporte, HAZLO. Nada idiotiza más que ir pegado a un montón de extraños, no poder subirse o bajarse del metro / micro o demorarte horas en un taco.
3. Aire.
De donde sea que vengas de Chile, el aire será mejor que en el hoyo que es Santiago. Prepárate para que las alergias se disparen, así como la tos y los resfríos.
4. Distancias.
TODO está lejos, y el concepto de "cerca" es muy extraño para los santiaguinos. Prepárate para pasar haaaarto rato en la micro o el metro, y a hacer trabajos en grupo por Google Docs. ¿Juntarse? si no es en la U, no va a pasar.
5. Peligros.
Santiago, como muchas ciudades grandes, es peligrosa. Aprende a tener cuidado y a no andar con muchas cosas valiosas (ni siquiera metas mucho en tu billetera, lo importante escóndelo en un bolsillo dentro de un bolsillo en tu mochila.
6. Ritmo de vida.
En provincia la vida va a un ritmo calmado, y en general nadie tiene apuro de nada. ¿En Santiago? La gente anda tan apurada que ni siquiera paran a apagar el cigarro que botaron al suelo. Es una ciudad colapsada y siempre estará lleno por donde vayas.
7. Simplemente no es como tu casa.
Aunque algún día te acostumbres (yo llevo AÑOS sin hacerlo), nunca será como tu casa.