Una serie de críticas ha generado la modificación en los requisitos de postulación de Becas Chile. Y es que el año pasado, tanto para postular a becas de doctorado como de magíster, era necesario ser alumno regular o haber sido aceptado en un programa impartido por una universidad que rankeada dentro de las 150 (institucional) o 50 (por área) mejores mejores del mundo, en la medición que realiza el llamado Ranking the Shanghai (Arwu) y Times Higher Education (THE).
Sin embargo, este año la convocatoria señala que lo “deseable” es que la universidad se encuentre bien rankeada. Por lo mismo, lo anterior deja de ser ya un requisito.
Consultado por La Tercera, el presidente del Consejo de Sociedades Científicas, Jorge Babul, explicó que un principio Becas Chile no exigía el ranking, pero esto a larga se transformó en un problema porque con el tiempo se dieron cuenta de que “muchos iban a universidades que en calidad estaban por debajo de las chilenas”.
“Con el cambio de las bases 2016 de alguna manera se está volviendo al principio, cuando se iba a estudiar cualquier cosa a cualquier lugar”, señaló el investigador.
Algo similar opina el rector de la Pontificia Universidad Católica, Ignacio Sánchez, quien añade que “es vital mantener el criterio de calidad para asignar las becas, medida en los antecedentes del postulante y de la universidad en que realizará los estudios”.
En este sentido, recalca que hay muchos programas impartidos por Ues chilenas, especialmente de doctorados, “que están a nivel internacional. Por esto, los becados deben asistir a universidades y programas que sean superiores a los que se imparten en Chile, para poder entregar su aporte científico, artístico y profesional a la vuelta”.
Para el diputado de la UDI y miembro de la comisión de Educación de la Cámara, Jaime Bellolio, esta es “es una señal equivocada. Yo habría avanzado en otra dirección: si un estudiante queda en un programa elegible, que está entre los 50-100 mejores del mundo, inmediatamente debería tener la beca. Esas Ues. tienen un mejor sistema de selección que el nuestro”.
“Sería completamente equivocado dar recursos al extranjero para programas que tienen menor evaluación o calidad que en Chile”, concluyó.