“Bendita seas, beca de alimentación Junaeb, tú que me provees de alimentos en mis tristes días de escases, tú que sacias mi apetito con los manjares que tanto deseo en el aula de clases, tú que alegras mi morada todos los primero de cada mes”. – Antiguo proverbio del universitario hambriento.
Si sabes de qué hablo, mira esta lista con las 11 cosas que solo tú, usuario de la BAES, entenderás.
1. Cuando te la dan por primera vez en abril y tienes dos meses acumulados eres el mechón más feliz de la U.
2. Cuando estás en la fila del supermercado, llevas unas papas fritas y temes con tu vida que la cajera no te deje pasarla.
3. Cuando recién es el día 5 del mes y te quedan solo $3.000 en la tarjeta esta es tu cara:
4. Cuando haces una lista de las cosas saludables que comprarás el otros mes, y finalmente terminas comprando chaparritas y empanadas.
5. Cuando tus amigos tienen hambre y te dicen “no tenemos plata…”, tus instintos de supervivencia atacan y te dicen “corre”.
6. Sin embargo como eres buen amigo, terminas pagando la pizza igual. Total, Junaeb invita.
7. Cuando vas a comer a algún lado o al supermercado feliz de la vida y el cajero te dice que no te alcanza el saldo.
8. Cuando te gusta alguien y lo invitas a comer a algún “comercio asociado Junaeb” (tu sabes, McDonalds, Doggis, Burger King, en otras palabras, carne por montones), pero resulta que es vegano.
9. Cuando aún no entiendes como funciona bien la cosa, vas feliz a comprar copete con tu BAES y al pagar el funcionario te mira extraño y dice las 7 peores palabras que has oído en tu vida: “Con esta tarjeta no puedes comprar alcohol”.
10. Cuando ves las campañas que hace Junaeb en Facebook sobre la alimentación saludable y te sientes culpable porque la hamburguesa que te estas comiendo en ese momento viola todas esas reglas.
11. En diciembre le dices adiós con todo el dolor de tu alma; enero y febrero no serán lo mismo sin tus $32.000 pesos mensuales en comida. Este es un duelo que solo tú que tienes BAES entiendes.