Si bien los rectores de la Red G9 —que agrupa a las universidades públicas no estatales— apoyan la idea de que más instituciones se sumen al sistema de gratuidad, piden que existe un mayor control en cuanto a como éstas seleccionan a sus alumnos.
El rector de la Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) y presidente de dicha corporación, Claudio Elórtegui, afirman que es necesario “controlar especialmente que instituciones que no están en el Sistema Único de Admisión (SUA) vean regulado el número de estudiantes que admiten, de tal forma que no obtengan una ventaja por no estar en el sistema”.
Hoy en día, los planteles que forman parte del SUA publican de forma previa al proceso de matrícula, la oferta final de carreras y los cupos que estarán disponibles para cada una. Con la incorporación de la Universidad Católica Silva Henríquez hace algunas semanas, ahora son 34 los planteles que deben cumplir estos requisitos.
Para el rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, las universidades que accedan a la gratuidad debieran ser parte del Sistema Único de Admisión. Esto porque, según dice, los pone “en igualdad de condiciones, en un proceso de postulación masivo”. Además, plantea que en el caso de los estudiantes que deseen ingresar a instituciones técnicas, debieran pasar por un proceso de selección según méritos académicos.