Ser ayudante de algún ramo de tu carrera puede ser muy beneficioso por varias razones; podrás percibir ingresos por este trabajo, potenciarás tus conocimientos sobre el ramo, tendrás algo que incluir en tu currículum y muchas otras cosas. Sin embargo, no todo puede ser perfecto en la vida y como en cualquier otro trabajo, deberás pasar por situaciones malas y molestas como las que verás a continuación.
1. Que el profe te deje revisando millones de pruebas
Se supone que la ayudantía consta de apoyar al profesor en las clases y corregir un par de pruebas por cada evaluación, pero nunca faltan los profes aprovechadores que te delegan sus tareas para tener más tiempo libre.
2. Revisar las pruebas de tus amigos
Cuando te toca revisar las pruebas de tus amigos no faltarán los comentarios como "regalame unos puntitos", "revisa mi prueba con cariño", "acuérdate de que somos amigos", etc. De hecho, si necesitan tener una buena nota, lo más común es que pongan ojitos de gato con botas para ver si les ayudas de forma deshonesta.
3. Programar ayudantías y que no llegue nadie
Esto pasa generalmente con los mechones porque no organizan bien sus tiempos, les da flojera o simplemente creen que no les servirá de nada asistir.
4. Tomar pruebas
Extrañamente cada vez que tienes que tomar una prueba el curso completo cree que es la "hora feliz" y todos pueden copiarse.
5. Trabajar ad honorem
A veces tu anhelo por un buen currículum es mayor a tus ganas de ganar dinero, y aunque el puesto de ayudante sea ad honorem, lo tomas igual.
6. Las personas que creen que das clases particulares gratis
El deber de un ayudante consiste en programar y ejecutar ayudantías para reforzar contenidos con el curso en general, sin embargo, si alguien quiere clases particulares debes cobrarle (a menos que quieras hacerle un favor) y no todos entienden esto.
7. Cuando el profesor se justifica en ti
A veces los contenidos pasados en clase por el profesor, no son los mismos que preguntan en las pruebas y es básicamente porque a veces usan formas de años anteriores o simplemente se equivocan. Sin embargo, cuando no quieren asumir su error es común que digan que la materia que no pasó en clases la pasó el ayudante.
8. Tener que ser más paciente, amable, puntual, y trabajólico que el profe
Tu imagen siempre está en juego con este trabajo y es una regla de oro que debes tener una excelente actitud siempre, aunque el profesor sea un irresponsable, tenga poca tolerancia o cualquier otra característica que negativa, tu siempre debes sacar adelante el ramo (por tu bien).
9. Cuando das todo de ti y nadie aprende
No se sabe si ocurre porque no pudiste explicar bien la materia, los alumnos no manejan los contenidos previos requeridos o simplemente eran muy fomes, pero en algunas ocasiones hay grupos completos que no entienden nada en tus ayudantías y es muy frustrante.
10. Tener que esforzarte el doble por el ramo en el que eres ayudante
Una de las cosas más difíciles de ser ayudante es que debes manejar por completo el ramo en el que trabajas, por lo tanto, nunca dejas de estudiarlo y debes aprender todos los contenidos a la perfección.
11. Perder casi todo tu tiempo libre y vivir cansado
La labor de ayudante es realmente ardua porque trabajas casi a la par con tu profesor y todas las tareas adicionales que implica tu trabajo, además de los ramos que ya tienes, te dejan casi sin tiempo libre y completamente agotado.
12. Que las personas crean que eres un chupamedias
Siempre hay gente que cree que llegaste a ser ayudante porque estuviste haciendole la pata al profe durante todo el semestre, pero este trabajo requiere muchos más esfuerzo y dedicación del que la mayoría de las personas cree. A la larga debes acostumbrarte a estos comentarios o terminas sintiéndote agobiado.