Para cualquier mujer, el embarazo es un cambio radical en su estilo de vida porque trae consigo una serie de cambios hormonales, físicos, psicológicos y emocionales. Sin embargo, para una estudiante universitaria esto es dos veces más impactante porque está en el proceso de conseguir su título, y las cosas se tornan más complejas y difíciles porque deberá reorganizar su vida por completo.
A continuación podrás descubrir 13 cosas terribles que viven a diario las estudiantes embarazadas.
1. Descubrir que estás embarazada
La primera cosa terrible que debe enfrentar una estudiante embarazada es descubrirlo. Los momentos previos al test de embarazo te provocan ansiedad y adrenalina porque todo tu futuro cambiará si te sale el signo positivo. Quedar embarazada no es algo malo, el problema es que tendrás que cambiar muchas cosas de tu rutina universitaria de acuerdo a los cambios que experimentarás en tu salud, el parto y el posterior cuidado de tu hijo.
2. Las náuseas de los primeros meses
Como todo universitario, es normal que siempre tengas sueño y te sientas agobiada por las extensas jornadas de clase, estudio y actividades que implica ir a la universidad, sin embargo, cuando esperas un bebé debes sumarle a todas esas molestias, unas nauseas monstruosas que te mantendrán desconcentrada y realizando un esfuerzo enorme por no vomitar sobre tus cuadernos.
3. El exceso de atención
Cuando quedas embarazada, repentinamente muchas personas con las que ni siquiera hablabas comenzarán a preguntarte cómo te sientes, como seguirás estudiando, quien va a cuidar a tu hijo e incluso querrán tocarte la guatita, lo que es realmente incomodo.
4. Los profesores poco comprensivos
Te encontrarás con docentes que desaprobarán el hecho de que hayas quedado embarazada en medio de tu carrera y te complicarán infinitamente la aprobación de sus ramos porque no querrán que el resto del curso crea que te están ayudando demasiado.
5. Las preguntas íntimas
No faltarán las personas que te preguntarán ¿No te cuidaste?, ¿Cuánto tiempo llevas con el papá?, ¿Como se lo tomaron tus papás?, etc.
6. El transporte público
Los horarios de la universidad generalmente coinciden con los horarios punta, y es una triste realidad que la sociedad chilena tiene muy poca empatía con sus pares, por lo tanto tendrás que enfrentar una batalla campal cada vez que quieras ingresar al metro o la micro sin que te aplasten la guatita y será un milagro si alguien se digna a cederte el asiento.
7. Cuando tu bebé no para de moverse
Fuera de lo bueno que es tener un bebé sano y activo, tener que dar un exámen o hacer una presentación con una persona pateándote el estómago y comprimiendote la vejiga no es una gracia para nadie.
8. Las ganas incontrolables de ir al baño
A medida que tu bebé crece, tu útero se expande y deja mucho menos espacio para tu vejiga, por lo tanto, te resulta imposible mantenerte sentada en una clase por más de 40 minutos sin tener que correr al baño para hacer pipi.
9. La fecha de parto
Si no tienes la suerte de que tu bebé nazca en enero o febrero, la fecha posible de parto será tu peor pesadilla porque tendrás que pensar en cómo balancearás tus evaluaciones con la fecha en que te ausentarás, sin reprobar ningún ramo en el proceso.
10. Las preocupaciones financieras
Tener un hijo implica muchísimos gastos y solo tienes un par de meses antes que empiecen a llegar las cuentas. Esto es realmente estresante si estás en la universidad porque lo más probable es que debas buscar un trabajo para poder suplir los gastos de tu bebé y no sabes como vas a balancear todas esas responsabilidades.
11. Los falsos amigos
Cuando no puedes hacer las cosas que solías hacer con tus amigos porque el embarazo requiere mantengas reposo, tienes constantes citas con el doctor, exámenes y además te sientes más cansada de lo habitual, te das cuenta de que solo las personas que realmente te quieren siguen a tu lado y no les importa si no puedes salir con ellos o visitarlos como siempre. Los amigos falsos se alejan de poco y terminas perdiendo el contacto con ellos porque no están dispuestos a acostumbrarse a este cambio en tu vida.
12. Estar hipersensible
Los cambios hormonales te vuelven loca y todo lo que antes te parecía normal de un momento a otro puede hacerte llorar. Tu tolerancia a las malas notas, los problemas, y el estrés del estudio disminuirá considerablemente y te pondrás nerviosa, histérica o muy triste por estas cosas, lo que afectará tu concentración y representará uno mas de los tantos desafíos que implica estar embarazada en la universidad.
13. Los dolores
Sientes dolor de espalda, de cuello, caderas, pies, contracciones, calambres, tienes las piernas hinchadas, te pica la piel por el exceso de estiramiento, etc. Debes asumir todas estas molestias y aún así seguir adelante por tu amada carrera.