A medida que vamos creciendo, nos vamos dando cuenta de la importancia que tienen las relaciones interpersonales en el mundo. Desde relacionarse para actividades básicas hasta crear proyectos y funciones más complejas. Lo cierto es que en este momento donde las redes sociales, el internet y la interconectividad globalizada nos tiene constantemente en interacciones que requieren ciertas destrezas para llevarse a cabo correctamente. A continuación te mostramos algunas habilidades que te pueden ayudar a mejorar tu relación con los demás.
Comunicación Efectiva:
Lo primero es aprender a escucharse, si no nos entendemos nosotros mismos, nadie lo hará. Párate frente a un espejo, escribe oraciones con hartas consonantes y vocales y recítalas, los errores no se demorarán en aparecer. Luego, es sumamente importante entender que la comunicación no existe sin un otro. Por lo mismo, comprender que las personas quieren ser escuchadas al igual que tu quieres hablarles. Entender esto te ayudará a no ponerte ansioso al momento de comunicarte. Primero escucha todo lo que se te está diciendo, entiende las palabras y el significado y luego piensa en lo que vas a responder, no antes.
Objetivos:
Cuando nos relacionamos con los demás es muy importante tener un objetivo claro, que es lo que buscamos lograr con la comunicación. De no hacerlo, lo más probable es que estaremos reaccionando frente a lo que sucede y no tomando una participación activa en la conducción del dialogo. Por ejemplo, cuando voy a una entrevista de trabajo, mi objetivo es que me contraten, por lo mismo debo enfocar todas mis acciones hacia este motivo. Desde el lenguaje verbal hasta el no verbal y la proximidad son materia de detalles, pero que cambian profundamente el desenlace de la comunicación.
Seguridad:
En el momento de relacionarnos con los demás, la seguridad en lo que estamos diciendo y mostrando se vuelve fundamental. Es muy difícil creer o confiar en alguien que no se ve convencido de lo que esta haciendo. Por lo mismo, es importante que no te sientas menos en una conversación, si no sabes algo, dilo, no por eso está mal. Si piensas algo, dilo y fundaméntalo.
Resolver conflictos:
Probablemente la situación más complicada y que mayor manejo requiere. Por esto mismo, cuando estés discutiendo con alguien, cálmate, no dejes que las emociones controlen tu racionamiento. Primero es escuchar, reflexionar y luego responder, siempre con la idea de aportar a la discusión y no de ganarle al otro. Esto no es un debate profesional con jurados que determinan a un ganador. Aquí no gana nadie, solo se comparten puntos de vista.
Con la gran sobre población que existe en este momento en el planeta, especializarse y conseguir ventajas son la formula para destacar y lograr cumplir nuestros objetivos. Con estos consejos, seguro ahora podrás afrontar de una manera más preparada las relaciones interpersonales.