El primer año de universidad es un cambio importante en la vida de jóvenes que pasan a un contexto con más libertades y mayores responsabilidades, que les permitirán crecer y alcanzar sus metas.
La Universidad es una etapa de cambios, cargada de expectativas y preocupaciones por el futuro y por lo novedoso que resulta este nuevo entorno de amigos, docentes, exigencias académicas y hasta “lenguajes” nuevos, que están representados por los distintos saberes impartidos en las carreras.
Así, entrar a la educación superior implica para muchos jóvenes la construcción de una nueva identidad como estudiantes y futuros profesionales. En los estudios, los jóvenes conocen más acerca de ellos mismos y de su relación con el aprendizaje y los desafíos académicos. Además en su formación profesional, irán poco a poco conociendo sus carreras y el grado en que éstas cumplen sus expectativas.
Por esto, Beatriz Carreño, Psicóloga Educacional del Instituto de Rendimiento y Apoyo al Estudiante, CREAR-USS entrega algunos consejos para los nuevos universitarios:
- Considera que es un proceso de adaptación, requieres de un tiempo para conocer este nuevo contexto y aprender cómo enfrentarlo. A veces, los cambios generan inseguridades, pero también son oportunidades para crecer y es importante aprender nuevas estrategias, utilizando nuestros recursos personales.
- Conócete como estudiante y trata de auto examinar cómo estudias, cómo aprendes mejor, cómo y con qué te motivas y cuáles son tus principales desafíos para rendir en la universidad. Para cada uno de ustedes, ser estudiante no es algo “nuevo”, cada uno trae una historia con hábitos de estudio arraigados y es necesario evaluarlos para saber cómo funcionan frente a los nuevos desafíos.
- Busca activamente conocer la universidad, su infraestructura, el lugar donde se encuentra tu carrera y las múltiples oportunidades que te puede ofrecer y que te ayudarán a conseguir un mejor y más integral proceso de aprendizaje (actividades deportivas, bibliotecas, centros de apoyo).
- Preocúpate por conocer a tus profesores y compañeros(as). Recuerda que la universidad también implica adaptarte a un grupo social que te acompañará por varios años.
- Acostúmbrate a buscar información sobre tus ramos y sus condiciones. Las primeras semanas de clases te entregarán los programas de cada curso, en ellos encontrarás información relevante (contenidos, fechas y metodologías de evaluación, planificación de clases, entre otros) que te ayudarán a anticipar los requerimientos de cada cátedra.
- Planifica tu tiempo. Uno de los desafíos más importantes es organizar bien el tiempo para que éste alcance para actividades académicas y para la vida personal. En la universidad, a diferencia del colegio, la organización del tiempo depende del estudiante: es él/ella quien debe anticipar y programar las actividades, evaluando cuánto disponer para cada una de ellas.
- Confía en tus habilidades. No se trata de no reconocer los aspectos que debes mejorar, pero es importante que tengas claro cuáles son las fortalezas y recursos que te ayudarán a persistir y lograr tus objetivos.
Por último, es importante considerar que este proceso de adaptación puede implicar un desgaste y que debes estar atento a cómo te vas sintiendo y en qué ámbitos necesitas más ayuda. No esperes a sentir un estrés muy alto antes de pedir ayuda o hacer cambios que te ayuden a reducirlo (por ej. practicar deporte, organizar mejor tus tiempos, comer y dormir adecuadamente, etc.).