La universidad no sólo es un lugar de sacrificado estudio y esfuerzo, sino que también es un lugar para encontrar el amor. Y para todos aquellas parejas que se conocieron en la U, aquí van 14 cosas por las que han pasado y que sólo ustedes entenderán.
1. Las miradas coquetas en clases/recreos.
Cuando recién se conocen y están en la fase de conquista, las miradas coquetas son pan de cada día. Hola guap@, ¿qué música te gusta?
2. Almorzar con un grupo grande, pero no pescar a nadie más.
La emoción de conocer a alguien es tan grande que son incapaces de conversar con alguien más que no sea su enamorad@.
3. Esperarse después de clases.
Si tenían clases distintas, es casi seguro que te hayas quedado infinitas horas esperando por tu polol@. Espero que hayas aprovechado de estudiar ¡O de dormir una rica siesta!
4. Utilizar todos y cada uno de sus momentos libres para besuquearse.
¿No será mucho, digo yo? Pensé que esta etapa se terminaba en la adolescencia, pero los pololos que se conocen en la U son una muestra viva de que las hormonas siguen dando vueltas. ¡Consíganse un cuarto!
5. Separarse SÓLO cuando van al baño.
Amor apúrate, que ya te extraño.
6. Hacer TODOS los trabajos en grupo juntos.
Ay chiquillos, si yo entiendo que cuando uno se enamora quiere pasar todo el día con la otra persona, ¡pero compartan con el resto de la clase también!
7. Sufrir un ataque de celos en pleno carrete.
Ya, ¿pero tienen que bailar así? ¡Te está manoseando enter@! Te falta darle un beso no más. Anda, dale un beso. ¡Atrévete! Ya chao, yo me voy.
8. Sentarse al final de la sala para comerse.
Ya po cabros, si igual todos los cachamos. Mejor irse al baño, y pasa más piolita. Oigan, ¡el profe los está viendo!
9. Pelear en los pasillos.
La U pasa a ser como su casa y, lamentablemente, fueron o son muchas las ocasiones en las que lavan los trapitos sucios frente a todos. ¡Y después hay que ir a clases!
10. No me gusta como te mira ese/a mechón/a.
¡No, no, no! ¿Crees que soy tont@? Si te come con la mirada. ¡¿Qué?! ¡¿Te tocó apadrinarlo?! ¡¡¡AH NO!!!
11. Intentar estudiar juntos... terminar regaloneando.
Amor, ¿te quedas estudiando conmigo para el súper-mega-importante examen que tengo mañana? Todos sabemos que harán de todo, ¡menos estudiar!
12. Darse cuenta que pasan DEMASIADO tiempo juntos.
Un verdadero milagro. Cuando el tiempo pasa y la pasión disminuye, los pololos universitarios se dan cuenta que pasan demasiado tiempo juntos. ¡Gracias Señor! Llegó el momento conocer al resto de los compañeros. Hola, creo que te he visto antes, ¿cuál es tu nombre?
13. Tranquila amor, yo te afirmo el pelo.
Parte importante de la vida universitaria son los carretes y, si conoces a tu polol@ ahí, lo más probable es que seas testigo de sus peores momentos. ¿Para qué sirven las parejas si no es para contenerte cuando estás vomitando?
14. Ser la pareja conocida por toda la facultad.
Finalmente, una de las cosas que pasan las pololos que se conocen en la U es ser conocidos por todo el mundo como "los pololis". Puede que tú no los caches, pero ellos seguros te cachan a ti. Y el día que te vean almorzando sol@, ¡sabrán que algo pasó!
Y a ti, ¿te ha pasado alguna de estas cosas?