Las series de televisión son una bendición. No solo nos hacen perder horas y horas que podríamos ocupar en otras cosas, como por ejemplo, estudiar, sino que también nos enamoran, rompen el corazón, trauman y dejan esperando por años a que nuestras series favoritas regresen. Sí, una de las peores partes de ser fanático de las series es que llega el día en que tu serie termina o es cancelada injustamente.
Cada uno tiene su lista personal de favoritas y de las que cree que deberían volver, pero hay diez que definitivamente necesitan regresar a la televisión:
1. Drake y Josh
Ninguna serie infantil se le compara a Drake y Josh (bendito Nickelodeon). Estos dos hermanastros nos sacaron más de una carcajada cuando éramos chicos, y probablemente todavía cuando estamos aburridos y terminamos viendo el Nick. Fue creada y producida por Dan Schneider como un spin-off de El Show de Amanda, en el que en un capítulo salen Drake y Josh peleando por un camarón. Se transmitieron cuatro temporadas entre el 2004 y el 2007 que nos quedaron pocas, con frases inolvidables que pasaron a ser parte de la cultura pop (¿quién podría olvidar a Josh atropellando a Oprah?). Fue cancelada por decisión del equipo creativo detrás de la serie, pero sigue siendo considerada uno de los mejores productos de Nickelodeon, quizás incluso el mejor, a la fecha. Si volviera sería épico.
2. Lizzie McGuire
¿Se acuerdan de Lizzie McGuire? Esa serie infanto-adolescente que terminó en el 2004 pero que se siguió transmitiendo por Disney Channel por un tiempo, protagonizada por Hilary Duff y que tuvo hasta películas. Fue producida por Susan Estelle Jansen -también hizo Boy Meets World- y Stan Rogow. A diferencia de absolutamente todas las series que daban en Disney Channel cuando eramos chicos (y para qué decir ahora), Lizzie McGuire era extrañamente creativa para el canal, mostrando en paralelo a Lizzie y a su dibujo animado que actuaba como una especie de conciencia. Era divertida, chistosa pero también tocaba temas muy series para el público al que se dirigía, como la anorexia. ¿Lo mejor que hizo alguna vez el canal del ratón? Probablemente.
3. The Office
Esta serie terminó hace poco, recién en el 2013, y por eso la extrañamos todavía más. The Office fue producida por Steve Carell y Mindy Kaling (con esos productores, ¿queda alguna duda que era para matarse de la risa?), y los mismos actores también integran el elenco. Tuvo nueve exitosas temporadas que se centraron en una oficina de la empresa ficticia de ventas de papel Dunder Mifflin, que tiene trabajadores un tanto desquiciados, en un formato de falso documental (los personajes saben que hay cámaras en el lugar). El humor de The Office no era el típico de las series de comedia, siendo más inteligente... generalmente, porque a veces simplemente era una completa locura.
4. Lost
Un grupo de personas quedan varados en una isla desierta después de sufrir un accidente aéreo, por lo que deben sobrevivir como sea. Era el temor de muchos vuelto serie de televisión, y por eso estuvimos pegados a las pantallas para ver el final de Lost en el 2010. La serie fue producida por Bad Robot, Touchstone y ABC, tuvo un éxito enorme en todo el mundo e incluso hizo un epílogo para satisfacer un poco a los fanáticos que quedaron pidiendo más. Seis temporadas se hicieron poco para una serie que cuenta con el episodio piloto más caro que ha sido rodado en la historia de la televisión. En Chile, la serie fue emitida en Canal 13 con dos años de retraso, ¡y la queremos de vuelta!
5. El Príncipe del Rap
Las noches de series antiguas en el Nickelodeon eran lo mejor por algo: Will Smith en El Príncipe de Bel Air. Esta serie producida por la NBC tuvo seis temporadas que se transmitieron entre 1990 y 1996, llegando a ser una de las más exitosas de los 90s. La historia se resume en la canción de los créditos de apertura de la serie, que seguro todos se saben de memoria: Will es un chico de Filadelfia que no tiene el mejor comportamiento y se anda metiendo en problemas en su barrio, por lo que su mamá lo envía a vivir con sus tíos ricos de Bel Air. Y el taxista que lo llevó no usaba desodorante. Era buenísima, especialmente si consideramos que Smith ahí ni siquiera sabía actuar, él mismo dice que le da vergüenza ver los primeros capítulos. Imagínense volver a ver a Will en el personaje, pero ahora siendo un capo.
6. 24
Esta innovadora serie fue increíble cuando recién salió. Los espectadores siguen la serie en tiempo real, es decir, todo lo que pasa lo están viendo. Por eso se llama 24, porque cada capítulo es una hora y la temporada completa corresponde a un día. Algo que nunca antes habíamos conocido, por lo que definitivamente valía la pena verla. Fue producida por Imagine Television y transmitida por Fox, siguiendo la historia del agente federal Jack Bauer en la unidad antiterrorista de Los Ángeles. Fue una serie policíaca, de drama y suspenso, que emitió su último capítulo en el 2010, pero sacó una novena temporada ambientada cuatro años después el año pasado... se supone que era algo excepcional, pero esperamos que signifique un regreso definitivo. Debería volver porque no existe nada más en televisión así, recuerden que esta serie estaba tan comprometida con su propuesta que durante los comerciales la acción seguía, y si en dos lugares distintos estaban pasando cosas importantes, la pantalla se partía en dos.
7. Sabrina, la bruja adolescente
Otra razón más para pasar toda la noche viendo el Nickelodeon hace unos años. Esta serie que contó con un grupo de productores que incluía a la propia protagonista, Melissa Joan Hart, trataba de una adolescente que al cumplir 16 años descubre que es mitad bruja y mitad mortal. A través de las siete temporadas, vimos a Sabrina crecer junto a su fiel gato Salem, y a Britney Spears, los Backstreet Boys, 'N Sync, Avril Lavigne... a una bruja adolescente siempre la visitan famosos así. Tanto fue el éxito que además de ser transmitida por Nickelodeon, la pudimos ver en televisión abierta a través de TVN y Canal 13. Fue una de las series más vistas a pesar de los problemas que hubieron con su trama, que a nadie le importaron realmente porque era genial.
8. Las chicas Gilmore
Ay, ¡qué tiempos! Las chicas Gilmore fue una serie Amy Sherman-Palladino, que narraba la vida de la madre soltera Lorelai Victoria Gilmore y su hija Lorelai "Rory" Leigh Gilmore. Tuve siete temporadas que se transmitieron entre el 2000 y el 2007 por Warner, teniendo un par de años retrasada su transmisión internacional. En Chile, la pudimos disfrutar en canal Mega a partir del 2008. Lo más reconocible de la serie son sus diálogos a ritmo alto, con personajes que hablan rápido y transmiten mucha información así, de una forma similar a como hablamos en la vida real (especialmente los chilenos). Además, estaba llena de referencias a la cultura pop y tocaba muchos temas que siguen vigentes hoy, como el feminismo, la educación y el clasismo.
9. Friends
¡Cómo no debería volver! Se terminó en el 2006 tras diez exitosas temporadas, pero se sigue transmitiendo en televisión y es una de las favoritas de muchos. Se trataba de seis amigos jóvenes que vivían en Nueva York, algunos compartiendo departamento, y todo lo que les sucedía. Era chistosa, liviana y dejó bromas que nadie que vio la serie podrá olvidar (¡Joey no comparte comida!"). Sus productores fueron Kevin S. Bright, Marta Kauffman y David Crane, emitiendo originalmente la serie por la NBC, pero en Chile la pudimos ver en Sony, Warner y Canal 13. La serie y sus actores además ganaron un montón de premio, como en Emmy, People Choice y hasta un Globo de Oro. Así que ¿por qué debería volver esta serie? ¡Por qué no!
10. Cómo conocí a tu madre
How I Met Your Mother es un mega éxito, literalmente Friends de la actualidad. Pero lamentablemente, el 31 de marzo del 2014 se emitió el último episodio, conocimos a la madre y la serie se dio por terminada. Producida por sus propios creadores, Carter Bays y Craig Thomas (que ha escrito capítulos de Futurama), la serie de comedia de situación tuvo nueve exitosas temporadas antes de finalizar, ganando un grupo de seguidores a nivel mundial. La serie se trataba sobre el arquitecto Ted Mosby, quien cuenta la historia extremadamente larga de cómo conoció a la madre de sus hijos. Ahí repasa básicamente toda su vida desde el 2005, presentándonos a sus compañeros de departamento ideales, Marshall y Lily, y a sus amigos Barney y Robin. La serie es genial y seguimos en estado de negación porque terminó.