Hay veces en que el amor se convierte en un verdadero obstáculo, ya que debemos decidir entre el corazón o la cabeza y eso no es nada fácil. Cuando quieres seguir creciendo profesionalmente, pero el amor por una persona dificulta esa evolución, suele pasar que sientes como si estuvieras atrapado, porque tus ganas de seguir mejorando quieren llevarte muy lejos, pero el estar enamorado y pensar en la hipotética posibilidad de alejarte de quien amas, te rompe el corazón. Si tienes ganas de emprender el rumbo para seguir estudiando, pero no sabes qué pasará con tu relación, tal vez esta nota te ayude a clarificar ideas.
Amor VS Desarrollo profesional
Puede que sientas que estás entre la espada y la pared, pero tal vez te estás ahogando en un vaso de agua. No se trata de que ambos aspectos estén reñidos, sino que depende de la astucia, perseverancia y las ganas de que una relación resulte. Cuando dos personas ponen de su parte, son capaces de crear soluciones efectivas en beneficio del amor.
Sinceridad ante todo
Si tomaste la decisión de irte a estudiar afuera, lo peor que puedes hacer es estirar el chicle y contarle a tu polol@ a última hora. Apenas surja la inquietud en tu cabeza debes conversar con tu pareja y tratar de pensar en una solución en común, ya que parte de estar en una relación es confiar en el otro y formar un equipo con él.
Amor a distancia
No se trata de usar una fórmula matemática, ni menos de compararte con otras parejas. El amor a distancia requiere de mucha racionalidad y responsabilidad, porque eres tú quien deberá tener la fortaleza suficiente para estar lejos de la persona que amas, seguir cultivando ese amor y además sobrevivir a las tentaciones. Suena complicado, pero el auto control es un arte que se aprende con el tiempo.
Un plan en común
Tal vez crees que inevitablemente tendrán que separarse, si es que optas por estudiar afuera, pero puede que no estés pensando con la cabeza "en frío". He conocido casos de cercanos que han aprovechado la oportunidad y terminaron viajando con sus parejas, ambos becados y con la tremenda oportunidad de estudiar en el extranjero, sin tener que renunciar a su relación.