Luego de permanecer en paro durante tres meses y con una toma que se prolongó por cinco semanas más, la Rectoría de la Universidad de Santiago consiguió un acuerdo con la Federación de Estudiantes para que éstos depusieran la toma y desalojaran las dependencias del plantel.
Sin embargo y luego de que los universitarios abandonaran el recinto durante la mañana del domingo, las autoridades de la casa de estudios se percataron de los destrozos y robos que quedaron como saldo de la ocupación en la Casa Central.
De acuerdo a información consignada por Emol, desde el lugar se habrían sustraído 30 notebooks y 10 tablets, además de daños a la infraestructura como puertas rotas y vidrios quebrados.
En conversación con ese medio el rector de la Usach, Juan Manuel Zolezzi, señaló que si bien se comprometieron a que no habrán sumarios políticos, sí habrán sumarios para dar con los responsables de los destrozos.
"Aquí nosotros nos dimos cuenta de que hubo participación de delincuentes y vándalos, que de alguna manera, o están dentro de la universidad o entraron y produjeron una situación de este estilo. Pero aquí hay un responsable y lo tiene que asumir así la Federación de Estudiantes porque ellos estaban a cargo de Casa Central", recalcó Zolezzi.
Consultada por este tema, la presidenta de la Feusach, Marta Matamala, dijo que quedarán atentos a la investigación y que como organización no avalan ninguno de los daños. Asimismo, aclaró que “la única toma que existió fue la de Casa Central; donde está rectoría” y que ésta “se condujo con bastante calma y normalidad”.