13 cosas que no sabías sobre ​la USACH

Si alguna vez te dijeron, ¡vamos a los pastos de ciencias!, o tal vez te preguntaron ¿hay sillazo hoy? Y en más de una ocasión te advirtieron ¡...no pises el escudo del león! o simplemente te trataron como cachorrito durante todo un año, este artículo es para ti. Con estos datos ya te habrás dado cuenta de que estoy hablando de los bienaventurados que estudiaron en la famosísima Universidad de Santiago de Chile.

Porque lo amerita y, a pedido de clamor popular, hoy dedicaremos esta sección a la ex U. Técnica del Estado, más conocida como USACH, y te contaremos 13 cosas que, seguramente, no sabías de tu “querida” universidad…

1. Escudo de entrada: si eres o fuiste usachino, lo más probable es que alguna vez en tu paso por la U, alguien te contó del mito urbano del escudo de entrada que esta por la antigua EAO, el cual no debe pisarse “por nada del mundo”, de lo contrario, te echarás todos los ramos que tomes ese semestre… Sí eso no te asustó a ti, de seguro, si lo hizo a muchos otros cachorros que evitaban pasar cerca de él y cual Alexis Sánchez hicieron más de alguna finta para evadirlo. También hubo quienes salvaron a más de un amigo de cometer tal pecado con un fuerte empujón, si tu fuiste el receptor de tal cariñito ya sabes a que se debió, corre y llama a tu compañero de la U, porque ahora sabes que fue por una muy buena causa.
2. El antídoto o contramufa: hubo muchos quienes por ir conversando no se daban cuenta y pisaban igual el famoso escudo, cuando esto ocurría antes de caer en pánico, lo más recomendable era entrar al “patio de los perros” y acariciarles la nariz a ambas estatuas…Otros, más arriesgados, se atrevían incluso, a darles un beso. Digo arriesgados porque hay que serlo para besar al par de lindas estatuas que quedan expuestas a las adorables palomas y a las miles de manos que los acarician día a día. Pero, tradiciones, son tradiciones… ¡dicen!
3. El Origen de las estatuas “del patio de los perros”: la verdad no se tiene muy claro el origen de los elegantes y devotos galgos que resguardan este patio, pero lo cierto es, que parecen haber nacido junto a los míticos edificios y vigilan desde su pedestal cada movimiento usachino… y bueno hay quienes incluso les han atribuido dotes milagrosos por haberlos ayudado a pasar aquel ramo infernal que se veía más que complicado. Milagrosos o no, ya son parte de la historia y del inventario de la U.
4. Edificios Antiguos: y siguiendo con la EAO, para muchos es inexplicable que se mantenga en uso una infraestructura tan antigua y endeble, déjenme contarles que aquellos edificios datan del siglo XIX y que fueron declarados Monumento Histórico Nacional en 1986, es por eso que más allá de realizar una que otra mantención (si es que las hacen) no se pueden modificar, ni mucho menos destruir.
5. El Aula Magna de la Universidad: o también conocida como “jaula magna”, en sus inicios (a mediados del siglo XX) fue pensada sólo como salón de actos, pero con el tiempo se convirtió en uno de los anfiteatros con mejor acústica del país, es más, en la actualidad el espacio es la única sala de conciertos en Santiago que presenta condiciones adecuadas y se acerca a la norma internacional de este tipo de inmuebles.
6. Planetario: no se sabe con exactitud de donde vino el robot principal que es la base de la atracción, pero cuenta la leyenda que fue una donación de la URSS durante el gobierno de Salvador Allende y que fue tramitado por el ex ministro Máximo Pacheco durante su labor en educación. Por las razones conocidas, el proyecto se congeló casi 13 años hasta que, finalmente, fue inaugurado en 1986. De lo que sí se tiene certeza es de su diseño, que fue inspirado en las pirámides Mayas, como homenaje a quienes también fueron incipientes astrónomos. Modernizado en el año 2013, el Planetario, hoy es uno de los museos estelares más modernos del mundo.
7. El mural: en la universidad existe un valioso mural donado por Roberto Matta, el artista lo donó a la UTE en 1971 y se titula “vivir enfrentando las flechas”.
8. El campus: el único campus de la universidad mide 320 mil metros cuadrados. Debido a esto, quizás a muchos les pasó que al contar que estudiaban en la USACH, les decían “…a te gusta caminar” o “caminan más que kung fu” y esto es porque todo el mundo sabe lo extenso del terreno y lo distante que están algunas salas y oficinas de trámites. Y como sabrán, en la USACH los administrativos son un poquito burocráticos y les encanta mandar a poner una estampilla por la Facultad de Medicina y otra en la Escuela de Periodismo... Los usachinos entenderán el "pique" que eso significaba.
9. Los Músicos: 39 músicos estables conforman la orquesta de la universidad
10. Las latas de cine perdidas: Según se publicó en la prensa, en el año 2012, 638 latas de cine que se creían perdidas durante la dictadura, fueron encontradas en una bodega de la Universidad, de ellas solo dos están digitalizadas, del resto aún no se ha podido identificar su contenido.
11. Felo ha sido el invitado más recurrente a las semana cachorra… #puraadrenalina.
12. Dato rosa: si pensaron quedarse los viernes a carretear en los exquisitos pastos del campus con la esperanza de conocer a algún “compañero de otra carrera", sepan que no todos los que carretean en los pastos son estudiantes, hay cientos de colados que han llegado a camuflarse en más de algún grupo.
13. El muro de los lamentos: así se catalogó a la vitrina en la muralla que está detrás de la facultad de ingeniería en donde se publican las mayoría de las notas. Antes de ir a ver los resultados, los mismos acongojados son los que hacen largas filas para ir a pedirle ayuda al Padre San Alberto Hurtado que esta cerca de la universidad, porque créanme...devotos o no, siempre llegan a pedir auxilio y a prometer eterno voluntariado con tal de pasar ese ramo "colador".

Podríamos seguir enumerando curiosidades de la USACH, buenas y otras no tanto, pero ojo, que siempre es con todo el cariño que se le tiene a tan noble institución y bueno, como diría el gran filósofo Jorge Valdivia, todo es con mucho respeto, y más que admiración por los más de 160 años de historia que la U. de Santiago lleva enseñando y formando a grandes profesionales.

Portada:Imagen CC.Nachote