Cuando por fin desbloqueamos el logro de ser profesionales titulados, luego de sobrevivir a la exigencia académica, el estrés, las diez mil y una cañas, el haberse echado uno que otro ramo y también a los profesores perros, sentimos una sensación de alivio que difícilmente podemos describir con palabras. Con diploma en mano, estás list@ para cumplir todos esos sueños y anhelos respecto a la vida profesional, pero no falta el ubicado que quiere echarte el avión abajo y se manda una serie de comentarios (que de ubicados no tienen nada) y te dejan algo asustado, a lo condorito con las patas para arriba y gritando plop, pensando en si las palabras de esa persona serán ciertas o no. Si no quieres meter la pata, intenta no mencionar estas 14 de las peores cosas que puedes decirle a un recién titulado.
1. Que ahora que se tituló deberá piensar en el futuro, las deudas, ir a vivir solo y todas esas cosas que agobian. Está bien que se venga un ciclo nuevo, pero todo a su tiempo
2. Que haber sido buen estudiante no le servirá de nada, porque afuera manda el más vivo. No hay que quitarle mérito a nuestro vieja amiga, la perseverancia
3. Que esa carrera está llena de egresados. Puede ser, pero hay que buscar el elemento diferenciador y de qué forma destacar entre el resto
4. O que su carrera es una con los índices más altos de desempleo. Una cifra no puede determinar la realidad de todos y como dice un poeta: "soy arquitecto de mi propio destino"
5. Que sin experiencia laboral, por más que busques y busques, es casi imposible encontrar trabajo. Como dijo Farkas, los sueños se cumplen y nada es imposible
6. Que en los primeros empleos pagan una miseria y que si no acepta, siempre habrá alguien dispuesto a hacerlo. No se trata de conformarse con una miseria, pero el costo de oportunidad del primer empleo es ganar poco (no tienes experiencia), pero aparte de tu remuneración ganas en conocimiento y datos para poner en el CV
7. O en el extremo contrario, está quien le dice al recién titulado que no acepte una pega si no gana al menos X monto. Es una realidad poco probable, que durante el primer año ganes lo que dicen esas encuestas de egresados por carrera (siempre la cifra está muy por debajo de eso). El tema es que no puedes quedarte en tu casa sentado, esperando a que llegue el trabajo en donde pagan lo que tú quieres ganar, pero te exigen un chilión de años de experiencia, que obviamente no tienes
8. Que el exceso de confianza siempre es bueno. Está bien creerse el cuento, pero vamos despacito por las piedras, ya que estás recién empezando y necesitas ser humilde para llegar a ser grande
9. Que debería haber estudiado otra cosa o haberse arrepentido cuando aún estaba a tiempo. Las decisiones se toman y se asumen las consecuencias, no sacas nada con pensar en lo que pudo ser, pero ya no fue. Además, si amas lo que haces, no hay nada de lo que pudieras arrepentirte.
10. Que va a tener que trabajar en cualquier cosa. Debes ser fuerte, perseverante y tener garra ya que si te toca trabajar en cualquier cosa, para salir del paso, sigues paralelamente tu búsqueda de pega en lo que estudiaste (con más ganas que antes)
11. Que la vocación no sirve de nada y las lucas mandan. Es verdad que los ideales no lo son todo, pero tampoco ganas nada estudiando algo que no te gusta para obtener más plata, porque tendrás que pasar años y años, más años, desempeñando una función que detestas y a la larga, sintiéndote frustrado
12. Que cuando encuentre su primera pega tiene que cuidarse de la ley del serrucho y desconfiar de todos sus compañeros de trabajo. Nunca hay que confiar al 100 por ciento, pero tampoco puedes andar por la vida de desconfiado eterno, porque el trabajo en equipo requiere complicidad. En todos lados hay gente buena y gente mala, pero conocer a ambos tipos te ayudará a crecer y entender cómo funciona el mundo, pero sobre todo, a cuidarte y estar alerta
13. O que la única forma de surgir es siendo lustra zapatos con la lengua o aplicando ley del codazo. Si eres bueno en lo que haces, no eres fácil de derrotar y tienes un espíritu que no se rinde, no necesitas ser la alfombra de nadie para seguir creciendo laboralmente
14. O que sólo con pitutos se logra dar con buenas pegas (y tú no conoces a nadie influyente). Tu desempeño laboral y calidad profesional también pueden llevarte justo a donde quieres estar. Pero con paciencia pequeño saltamontes, lento pero seguro.
Y tú, ¿cuál agregarías?