Como les contamos ayer, esta semana el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, se abrió a la posibilidad de que universidades que no pertenecen al Consejo de Rectores (CRUCh), pero que sí cumplen con algunas exigencias mínimas, puedan acceder a la gratuidad en educación superior anunciada hace casi un mes por la Presidenta Bachelet.
Los criterios planteados por el secretario de Estado, apuntan principalmente a que éstas sean instituciones con libertad de pensamiento, independientes, que no estén controladas o vinculadas a empresas con fines de lucro y que sus balances económicos sean transparentes.
Así, uno de los planteles cuyos estudiantes no podrían acceder a la gratuidad debido a que la institución es controlada por un empresa privada, es la Universidad Andrés Bello, que junto con la Universidad de Las Américas y la Universidad de Viña del Mar, pertenecen a al grupo internacional Laureate.
Consultado por este tema, el rector de la UNAB, José Rodríguez, dijo a La Tercera que le preocupa “ver a una autoridad empecinada en establecer una política claramente discriminatoria hacia los estudiantes y las universidades que escogieron para cursar sus estudios superiores”.
“Lejos de solucionar el problema, insisten en generar discriminaciones ilegales, puesto que la ley no permite establecer diferencias entre universidades que tengan entre sus miembros activos a personas jurídicas, con o sin fines de lucro”, aseguró el académico.
Imagen CC Norero