Si empiezo a boletear, ¿dejo de ser carga familiar?

Un gran porcentaje de universitarios deben -o algunas veces quieren- trabajar al mismo tiempo que estudiar. Esta situación se origina cuando muchas veces no alcanza el dinero ¡ni con el Crédito con Aval del Estado! para pagar el arancel universitario o de algún instituto técnico donde estudiemos. Todos sabemos que estudiar en Chile es mas un privilegio que un derecho que divide y crea desigualdad. Pero ¿Qué pasa si queremos trabajar, estudiar, pero no independizarnos del todo? Pues si bien muchos trabajan para pagar su carrera, otros lo hacen para poder solventar los gastos diarios o regalonearnos con salir a comer o comprar algo que nos gustó, pero sin la intención de irse de la casa familiar ni menos dejar de percibir los beneficios que tenemos por ser estudiantes, tal como la salud.

Tanto en el sistema público (FONASA) como en el privado (ISAPRE), son bastante estrictos en este tema. En el reglamento publicado por Chile Atiende, señalan todos los requisitos que deben cumplir las personas que pueden acceder a ser carga familiar. En el caso de los mayores de 18 años, pueden ser carga familiar hasta los 24 siempre y cuando la persona sea soltera y acredite estar estudiando tanto en la enseñanza: media normal, técnica, especializada o en alguna institución de educación superior reconocida por el Estado de Chile.

Otro requisito para ser carga familiar al ser mayor de edad, es vivir a expensas del beneficiario; aquí toca el tema de nuestra nota.

¿Qué pasa si somos beneficiarios y no queremos dejar de serlo por querer tener nuestro propio dinero? ¿Suena bastante injusto, no? Para este caso la ley señala que si podemos tener ingresos y no perder nuestra categoría de carga familiar, SIEMPRE Y CUANDO no recibamos una renta igual o mayor al 50% del sueldo mínimo.

Así que chic@s estudiantes podemos trabajar y emitir boletas sin dejar de ser carga familiar; solo hay que ir al tanto con el reglamento.

OJO, que esta nota esta dedicada sólo a los que emiten boleta, pues si tienen contrato la cosa cambia rotundamente, ya que ahí ya comienzas a cotizar en alguna AFP y en FONASA.

Imagen CC Francisco Osorio