El secretario general de la Universidad Arcis, Mauro Salazar, descartó que en ese plantel existan "listas negras". Esto, en relación a los dos alumnos que fueron citados a declarar ante el Tribunal Universitario, por haberse manifestado contra las autoridades de esa institución. En tanto, Manuel Erazo, estudiante de Antropología que lideró las protestas al interior de la universidad y que figura como uno de los acusados, sostiene que acá existe "persecución política".
Según explicó a Emol el funcionario de la Arcis, el proceso "será asumido cautelando todos los derechos que asisten a los estudiantes de Arcis, muchos de ellos, quizás la mayoría, se expresaron por vías pacificas y democráticas, y ello no constituye en ningún caso figuras punibles, sino que forma parte del juego democrático". Además, dijo que pese a que existen "situaciones que son un tanto más complejas", igualmente serán "respaldadas con todos los procedimientos, y derechos que asisten a los estudiantes", ya que la universidad "se fundó en valores libertarios" y "no hay lugar para listas negras".
Por su parte, Erazo cuenta que "supuestamente existen dos denuncias. La primera por una supuesta amenaza a un funcionario, que nadie conoce. Se dice que lo amenacé en un espacio en la universidad y hay dos testigos, uno es un profesor y el otro está protegido. Ahí se empieza a ver lo extraño de todo esto, con personas protegidas". La segunda, tiene que ver con el intento de toma de una oficina administrativa, "donde según las declaraciones, sólo se logra individualizarme a mí", sostiene el estudiante.
Carlos Sánchez, el otro estudiante que fue citado al Tribunal Universitario, explica que a él se le acusa de "haber instado a la violencia contra la rectora de la institución Elisa Neumann o haber abierto la reja de la calle Libertad, que la cerraron con soldadura y yo encabecé el movimiento que terminó por abrirla".
Para el primero, el asunto es más complicado, ya que solicitó por segunda vez el Crédito Aval del Estado para cursar la carrera y no puede solicitarlo por una tercera vez si es expulsado.
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