¡Mi oficina es una constante pasarela! Trabajo en una agencia ligada a la moda, el cuidado personal y todo lo relacionado con el marketing en productos de belleza y tendencias. Por ende, nuestro equipo está compuesto sólo por mujeres y nuestra líder, a la cabeza, es una ex modelo de pasarela. ¡Sí, mi jefa es una mujer estupenda! Todo luce perfecto en ella. Un pelo rubio soñado, una figura delgada envidiada y un nivel de glamour que todas quisiéramos poseer.
El mirar todos los días su ropa y enormes carteras ejecutivas, ya te provoca un resto de envidia. Porque nuestro comentario constante entre las chicas de la empresa, es su enorme closet y cientos de prendas que fomentan su admiración y gusto por la moda y las cosas rosadas. Ama ese color y todos los días dentro, de su outfit básico, lleva algo del tono como cábala de una jornada previsora y llena de logros. ¿Rosado? ¿Un poco crazy dirán? Quizás, pero sólo puedo afirmar que ¡Sí! ¡Es una versión de Reese Witherspoon!, en Legalmente Rubia.
Y aunque esta comparación podría acercarla a una imagen un tanto superficial y frívola, debo re contra afirmar que ella es todo lo contrario. Ama la moda y el lucir perfecta, pero es una mujer muy sencilla, comprensiva, nada complicada y la jefa más relajada que uno puede tener.
El día en mi oficina comienza revisando las últimas tendencias, mientras tomamos desayuno con jugo de naranjas y un kutchen de arándanos. Su instinto maternal está despierto todos los días, mientras nos aconseja como comer y mantener una vida saludable. Si necesitas algún consejo, ¡es la mejor! Es como una enciclopedia abierta de mil y un tema, es una mujer culta y generosa con sus conocimientos. ¡Es una gran compañera!
¡Porque sí! acá en la oficina todas la queremos y nos encanta que nos incentive a lucir espectacular las 24 horas del día, porque acá si que no cuenta lo de "en casa de herrero, cuchillo de palo". La filosofía de la empresa está tan arraigada que no cuenta el predicar y no practicar. Por ello, el gusto por la moda y la siempre excelente presentación personal, es un valor agregado desde el primer momento que pones un pie en la oficina. ¡Acá todas debemos brillar!