Probablemente ya perdiste la cuenta de la cantidad de Newsletters que han llegado a tu correo; los de tu universidad, AFP, banco, casa comercial, etcétera. Esa es la vía por la cual diversas instituciones se comunican con su grupo objetivo, el tema es cómo lo hacen para que los mensajes sean bien recibidos y no se conviertan en spam.
Si estás ad portas de cumplir esta función o ya la realizaste, pero algo no funcionó, estos tips te ayudarán:
1. Planifica: en esta etapa debes establecer el target, tus objetivos, el presupuesto que tienes para ello, el modo en que pondrás en práctica la campaña y harás seguimiento de ella. Por supuesto, no olvides definir si necesitas un equipo de trabajo o incrementar el que tienes.
2. Construye una lista de clientes basada en permisos: el envío de correos no solicitados puede transformarse en spam y arruinar la reputación de tu empresa. Apuesta por los correos enviados a personas que han pedido recibirlos. ¿Cómo logro eso? Entregando la opción, a quienes entren a tu web, de suscribirse gratuitamente a ella.
3. Incorpora instrucciones que permitan la recepción del mail: por ejemplo, puedes incluir un mensaje que diga: “para asegurar la entrega de nuestros e-mail en su correo, por favor agregue [email protected] a su libreta de direcciones”. Y también preocúpate de entregar un link para revisar lo enviado desde otra dirección en caso de que tu correo no se pueda ver. Para ello, una leyenda como “si usted no visualiza bien este mail, haga click aquí”, es una buena opción.
4. Diseña una campaña creativa: a cambio de la información de contacto, ofrece a tus clientes algo de valor, como un newsletter mensual, un seminario online gratuito, o mayores datos sobre tus productos y servicios. Además, preocúpate de que tu mensaje sea corto y lleve el logo de tu empresa.
5. Incluye un enlace para anular la suscripción: evita retener de forma obligada a tus clientes, el que ellos sigan tu campaña o informes depende de la calidad y seriedad de tu trabajo.
6. Implementa una política de privacidad clara y concisa: en ella debes detallar el trato de la información personal que te entregan tus clientes e incluir el link que corresponda.
7. Cuida el horario de envío: es importante analizar las horas en que son abiertos los correos enviados, ello te permitirá definir una pauta de acción para potenciar la efectividad de tu campaña.
8. No descuides el subject: éste es el primer mensaje que llega a la bandeja de entrada y la razón por la que tu cliente lo abrirá. Así que por ningún motivo incluyas signos como “@” o “#” y palabras sospechosas que suenen a ofertones de última hora. También evita utilizar mayúsculas.
9. Atención con la ortografía: puede sonar obvio, pero los errores en los mails son imperdonables. Por tanto, antes de enviar un correo o de terminar tu newsletter revisa cuidadosamente lo que escribiste. Eso hará la diferencia en que tus mensajes tengan buena recepción o terminen en la papelera.
10. Mide el éxito de tu campaña: es muy importante que manejes métricas para monitorear la acogida de tus correos electrónicos. Por ejemplo, debes medir la cantidad de mails enviados, cuántos de ellos fueron abiertos y el porcentaje de clicks que generaron. De ese modo podrás definir nuevas metodologías o fortalecer las que has utilizado.
Y como dato adicional, te recomiendo revisar los 4 recursos para desarrollar una estrategia de marketing digital eficiente y el libro “El arte de medir”, de los españoles Gemma Muñoz y Tristán Elósegui, en él encontrarás importante información sobre análisis y optimización de campañas.
Imagen CC ePublicist