La oficina es uno de los lugares donde pasamos gran parte de nuestro día y donde, además de trabajar y compartir con los compañeros, comemos ¡y por montón! Acá te dejamos un listado con las razones de por qué no podemos parar de comer:
- Hay 500 personas en la oficina, por lo que es probable que hoy sea el cumpleaños de alguien. Y ha comprado torta.
- El jefe compensa las 16 horas que llevas concentrado bajo una luz fluorescente trayendo ¡unos aperitivos!
- Tu mejor amigo se pasa el día mandándote por chat todos los restaurantes a los que le gustaría ir.
- El fin de semana llega pronto, así que hay que ponerse a planificar un brunch desde el lunes.
- Tu compañera de mesa tiene un arsenal de barritas de chocolate en su cajón.
- Se supone que deberías estar revisando una tabla de excel...
- Masticar es la actividad más física que puedes hacer durante el horario laboral. ¡Hay que moverse!
- Huele a comida desde las 11 de la mañana hasta las 6 de la tarde.
- Estás oyendo a alguien masticar.
- Tienes calor.
- Tienes frío.
- Alguien te invita a comer fuera. Tú ya has comido, pero… haces un esfuerzo y le acompañas.
- Trabajas mejor cuando estás comiendo.
- Tienes la boca seca.
- Necesitas una distracción.
- Estás distraído.
- Necesitas concentrarte.
- No tienes hambre, pero te mueres por comer algo dulce.
- No tienes hambre, pero te mueres por comer algo salado.
- ¡Uf! Te vuelve a apetecer algo dulce.
- Tu compañero de mesa te pregunta qué hiciste anoche y la respuesta tiene que ver con comida.
- Buscar comida gratis es parte de la diversión de trabajar en la oficina.
- La comida gratis, sin duda, sabe mejor (así que te la comes, sea lo que sea).
- Tu compañero ha decidido traer repostería casera (así que te la comes, sea lo que sea).
- Tu compañero está "demasiado lleno" para acabarse su comida (así que te la comes, sea lo que sea).
- Tienes resaca.
- Estás cansada.
- Te sientes con mucha energía.
- Tienes sed, pero la comida está más cerca que el agua.
- Tu compañero de mesa está comiendo algo.
- Estás en mitad de una teleconferencia y no tienes nada que decir.
- Necesitas hacer algo con las manos durante la teleconferencia.
- El recepcionista tiene caramelos en su mesa.
- Es la hora de comer.
- Es la hora del aperitivo.
- No has desayunado.
- ¡ A re-desayunar! (El concepto existe.)
- Ya has desayunado pero no puedes dejar de pensar en ello.
- Te has traído un triste bocadillo para comer.
- Has visto una foto de comida en el ordenador.
- Acabas de echar un vistazo a Instagram.
- Has leído algo sobre una dieta, y piensas que nunca podrías llegar a hacerla.
- ¡Eh, alguien ha traído galletas!
- Tu compañera de mesa es intolerante al gluten, así que tienes que probar cómo te sientes después de comer algo con trigo. (En serio, hay gente que lo hace.)
- Alguien ha mandado un mail a toda la oficina diciendo que ayer dejó comida en el comedor.
- Es el día después de Halloween/Navidad/Reyes/San Valentín/Semana Santa…
- Hay un camión lleno de comida fuera.
- ¿Alguien quiere esta barrita de cereales?
- Si no te lo comes, se pondrá malo.
- Alguien está hablando de lo que va a cenar esta noche.
- Tienes hambre.
Fuente: Huffington Post