Este lunes 14 de abril, se reunieron los representantes de las nueve universidades privadas del Consejo de Rectores (Cruch) con el Ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, para resolver ciertas dudas que tenía el llamado "G9", respecto a los recursos que entregaría el Estado a las instituciones privadas.
El encuentro era importante para los rectores de los establecimientos de educación superior privada, quienes se encontraban "preocupados", luego que el ministro de Educación declarara en una entrevista, que habría un "trato preferente" hacia las universidades estatales.
La reunión "fue extraordinariamente clarificadora de algunos temas, que en el último mes, habían quedado algo confusos y con cierta preocupación de nuestra parte", dijo el rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez y luego agregó: "Esta reunión fue muy buena porque aclaró esos temas y permite desarrollar un trabajo conjunto".
Según explicó el rector de la U. Católica, "el ministro reconoce ampliamente que estas universidades del G9 son de vocación pública y que tienen muchísimos años -algunas 126 años- aportando al desarrollo del país", por lo que "fue bien claro en decir, que el financiamiento tiene que ser similar (al de las ues estatales), tanto en docencia como en investigación".
Lo que hasta ahora quedó claro, es que el aporte que el Estado haga en materia de docencia a los planteles privados, dependerá de la "matrícula" que tenga cada U. Sánchez lo explica así: "la institución de mayor calidad que atraiga a más estudiantes por la calidad de sus programas, de sus profesores y de su infraestructura, es la que va a recibir del Estado el mayor aporte, no va a haber una diferenciación de propiedad en esa entrega de recursos".
En otras palabras, la asignación de recursos ya no va a depender de si la universidad es estatal o privada, sino que se tomará en cuenta "la calidad" de esa institución.
Respecto de la gratuidad en la educación superior, el rector de la UC dice que "en la medida en que empiece a haber más recursos, ahí puede comenzar a aumentar, para llegar a una gratuidad en seis años".
Sobre los recursos en el ámbito de la investigación, lo que se acordó fue que el financiamiento aportado por el Estado, tendrá que ver con la calidad de los proyectos. Con esto, "no habría ninguna diferencia" entre ues estatales y privadas, "porque estarían todas en las mismas condiciones de participar", afirma Sánchez.
Fuente: Emol