Cada año entran nuevos profesionales al mercado laboral, lo que equivale a más competencia. Esto provoca que tengamos que preocuparnos mucho más de los detalles a la hora de buscar trabajo. Todo el proceso de elección importa: Curriculum Vitae, búsqueda y entrevista de trabajo.
¿Necesitas un poco de ayuda? Pues la directora de Operaciones de la compañía latina de Recursos Humanos VON DER HEIDE, Catalina Moreno, entregó información sobre algunos mitos y verdades que surgen al momento de buscar empleo, junto con recomendaciones para enfrentarse a ellos de la mejor manera:
MITO: Un buen CV asegura empleo
El Curriculum Vitae y nuestro perfil en las redes sociales es la imagen que nosotros, como profesionales, mostramos al mundo. Es una radiografía de nuestra vida laboral. Por eso, queremos vendernos de la mejor forma, mostrando lo que somos capaces hacer por la empresa, así como nuestras habilidades únicas.
Sí, el CV es totalmente importante, pero también debemos saber que el momento clave para quedar en un trabajo es la entrevista. Allí es donde te juegas gran parte de tus cartas. Ya que tienes a oportunidad de mostrar persona a persona la clase de trabajador que eres, así como nuestras expectativas.
MITO: El CV debe incluir fotografía
No es un requerimiento legal, cada vez se requiere menos y si se hace es contra las normativas legales, además que le da una mala imagen a la empresa. Sólo tú decides si quieres que tu curriculum lleve una foto o no. Por ejemplo, puedes considerar que una foto tuya sonriendo puede transmitir mayor seguridad o también se puede dar el caso en que postules a un trabajo en que, precisamente, tu apariencia es lo que más importa.
MITO: Vestir muy formal
No hay que tomárselo tan a pecho. Si bien es lo correcto vestir con formalidad, no es obligatorio que debas vestirte completamente de terno. Lo importante es que la persona no se vista de alguien que no es, se pierde la espontaneidad, y aún peor, puedes sentirte inseguro.
Puedes vestirte de forma juvenil, con estilo y aun así mantener la formalidad. No hay que tomarse tan estrictamente la vestimenta, pero tampoco hay que llegar con traje de baño.
MITO: No preguntar sobre el sueldo
La transparencia es una de las cosas que más debemos buscar en una empresa Un trabajador debe sentirse con total libertad para realizar las consultas que posibiliten la mejor toma de decisión, especialmente con el tema de sueldos. Ahora bien, será evidente que sólo te importa el dinero si de lo único que hablas es el salario. A veces hay que tener flexibilidad, si es que realmente te gusta el trabajo al que postulas.
VERDAD: Ser natural
Si te aconsejan ser natural, es porque sí o sí debes hacerlo. Esto no es un mito. Actuar genuinamente crea una un ambiente de sinceridad y permite discutir con tranquilidad hasta los temas más complejos de una empresa. Si logras obtener un trabajo fingiendo una imagen, en algún momento la empresa conocerá a tu verdadero "yo" y los roces empezarán a destruir el ambiente laboral.
MITO: Más fortalezas te hacen un mejor candidato
Muchas veces, las debilidades te sirven mucho más para obtener un trabajo. Suena raro, pero hoy los empleadores no buscan a una máquina perfecta, sino alguien con el que puedan evolucionar.
Cuando nos preguntan nuestras fortalezas, tenemos la costumbre de agrandar nuestro curriculum, lo que puede ser fácilmente detectable por los empleadores. Sí son aspectos que los consultores tocan, porque tampoco quieren a un trabajador que no tenga "dedos para el piano", aun la capacidad para sobreponerse a las dificultades es bien valorada.
El consejo es asumir las debilidades y nunca mentir.
VERDAD: Habilidades blandas
Las mal llamadas "habilidades blandas", realmente no son así. Moreno piensa que no debieran llamarse así porque son más difíciles de desarrollar que las habilidades técnicas. Éstas dependen de la voluntad del candidato para mejorar. No provienen de un curso, sino gracias a la experiencia.
MITO: Un postgrado pesa más
En ciertas empresas es un requisito y en otras simplemente un plus. No obstante, se está volviendo una tendencia que los altos cargos de empresas tengan a personas con esta clase de estudios. En realidad, lo que realmente diferencia al candidato es cómo logre implementar lo aprendido. Por eso, tener un postgrado no es totalmente determinante, ya que la experiencia en el mismo campo laboral es lo que hace un trabajador grande.
MITO: Entrar a otra área no aporta
Esta es una variable dependiente, ya que si la persona logra integrar todas sus experiencias y aprendizajes, teniendo claro cómo cada una aporta en la nueva posibilidad laboral puede ser transmitido como una ventaja. En cambio, si lo vive como un camino errático y poco claro en relación a sus intereses y diseño de futuro, podría generar inseguridad en su posible futuro empleador.
Foto CC vía Flickr
Fuente: El Economista América