La vida de un trabajador tiene de dulce y agraz. En ocasiones sentimos que estamos en la cúspide, pero en otras creemos ser el peor en nuestro entorno laboral. Esto último, muchas veces está dado por una serie de debilidades que son propias del trabajo, pero que tú y solamente tú puedes revertir para transformar esas debilidades en fortalezas.
A continuación, un listado con siete debilidades propias de los trabajadores y cómo poder doblarles la mano.
1. Poco manejo de la tecnología: En un mundo dominado por la computación y las nuevas tecnologías, seguir pegado a la máquina de escribir no es buen aliado de la productividad. Lo mínimo que se pide de un trabajador por estos días, es que maneje las actividades básicas en un computador, como procesar textos o crear una plantilla en programas como Excel.
Si consideras que no estás en sintonía con las nuevas tecnologías, no esperes para inscribirte en algún curso de computación en algún centro de especialización. Por el bien de tu trabajo, actualízate.
2. Trabajo bajo presión: En la vida hay tiempo para todo, incluso, hasta para sacar la vuelta en el trabajo cuando llevas tus responsabilidades avanzadas. No obstante, si te dedicas a perder el tiempo durante toda la semana, y esperas el viernes para recién comenzar a producir, algo no anda bien en ti.
Claro está que el trabajo bajo presión no es óptimo, hacer las cosas apuradas es sinónimo de hacerlas mal. Por eso, programa de mejor manera tu semana, equilibra la jornada laboral para no sobrecargar tus días. Si es necesario, confecciona un horario en donde expongas claramente tus responsabilidades de la semana. Aparte de producir mejor, estarás más tranquilo y evitarás enfermedades como el estrés.
3. No saber trabajar en equipo: El individualismo en ocasiones es necesario y útil, pero en un ambiente laboral, donde todos deben remar para el mismo lado en beneficio de la empresa, es fatal.
Esta debilidad puedes superarla dejando tu “autismo” y egoísmo de lado. Únete a tus colegas para desarrollar trabajo en equipo. Muchas cabezas pensando juntas, siempre rendirán mejor que una.
4. Impuntualidad: Llegar tarde al trabajo es una debilidad que presentan muchos trabajadores en el país. Además de ser una debilidad propiamente tal, es una falta de respeto y una muestra de compromiso hacia la empresa.
Es cierto, en ocasiones es entendible la impuntualidad, por ir a dejar a los hijos al colegio o por una emergencia de última hora, pero transformarlo en una práctica repetitiva no está bien. Ante ello, levantarse antes para evitar andar corriendo contra la hora, es la mejor solución
5. Falta de prolijidad: Una debilidad muy recurrente entre los trabajadores de hoy, es ésta. Antes, todo era más metódico y los trabajadores más antiguos son siempre más perfeccionistas. Procura no hacer las cosas “al lote”, ni “a la rápida”. Tómate tu tiempo para desempeñarte bien y producir de manera óptima. Valga la redundancia, no olvides que al trabajo vas a trabajar.
Terminar tus quehaceres antes que tus colegas, no siempre es sinónimo de ser el mejor, al contrario, en casos es una clara muestra de flojera, ya que destinas el mínimo tiempo parta trabajar, y gran parte de la jornada para sacar la vuelta.
6. Falta de iniciativa propia: En la actualidad, el trabajador tiene más libertades en el trabajo. Su actividad puede ir más allá de lo ordenado por el jefe.
Hoy, el trabajador que no tiene iniciativa propia en algunos asuntos en los que puede colaborar, como aportar ideas en un proyecto o dar posibles soluciones frente a un problema, será más débil que sus pares.
No tengas miedo a hablar u opinar cuando corresponda, al contrario, la palabra te puede dar una fortaleza y un valor agregado, siempre y cuando tengas los argumentos para intervenir en ciertos asuntos.
7. Falta de autocrítica: Claro está, nadie es perfecto y en ocasiones erramos, porque es algo propio de los seres humanos, pero no tener la capacidad para notar nuestros propias faltas es una debilidad importante.
Un trabajador integral, es aquél que primero que todos reconoce sus errores frente a alguna situación laboral, y además busca como revertir la situación. Para ello, procura practicar un poco de humildad, de lo contrario solo conseguirás sepultar tu carrera laboral.
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