Durante mis 6 años de vida laboral, he pasado por varios trabajos, aunque lamentablemente nunca he tenido la suerte de decir “¡este es mi trabajo ideal!”, porque como sabemos, a los periodistas nos cuesta mucho encontrar pega y muchas veces debemos tomar lo que podemos y no lo que queremos. Pese a eso, estoy agradecida de las cosas que he aprendido en cada una de ellos, porque toda experiencia suma.
Pero, ¿Por qué ninguno de mis trabajos ha sido el idóneo para mí? Y pienso que es porque no se ha dado el binomio perfecto que es: buen trabajo + grato ambiente laboral. Es que si bien es importante que la labor que la persona esté haciendo le guste, también es fundamental que uno se levante contento sabiendo que va a convivir ocho o más horas al día con gente buena onda.
Si bien si me ha tocado tener trabajos entretenidos, como el último que fue en un diario, en el cual debía salir mucho a terreno e ir a pautas, no puedo decir que todas, pero sí algunas personas no eran de lo más amables que digamos, aunque para ser sincera estoy pensando en una sola, la que fue mi jefa mientras mi editor estaba de vacaciones. Me hizo “la vida a cuadritos”. Era de esas típicas jefas déspotas, que te tratan mal y encuentran todo malo. Además lo otro negativo es que en la oficina no había un espacio físico para almorzar, por lo que no se daba la oportunidad para poder tener una convivencia con el resto de los compañeros, porque la hora de almuerzo es como “el” momento para poder alternar y relajarse un poco del trabajo, pero acá no se podía, ya que cada uno almorzaba en su escritorio, mal.
En cambio, tuve un trabajo en mi universidad cuando recién me titulé, como encargada de informaciones del proceso de admisión que era medio aburrido, porque habían muchas horas muertas, pero tenía dos compañeros que eran muy divertidos y nos entreteníamos harto.
Bueno, en consecuencia si me dan a elegir, me quedo con un buen ambiente laboral, porque si uno está agradada dentro del lugar de trabajo, con gente que no busca la discordia, ni el cahuín, ni trata de pisotear al de al lado o jefes que saben serlo, sin tener que recurrir al maltrato, cualquier labor es más agradable.
Espero poder encontrar algún día ese trabajo perfecto que mencionaba al principio, aunque como sabemos ese concepto es bastante abstracto y siempre nos tendemos que topar con gente pesada y que tira mala onda. Lo importante es que a uno no le llegue esa vibra negativa y se pueda trabajar tranquilo. Y ustedes ¿Qué prefieren?
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