Todos queremos estar motivados - y si tenemos vocación - también nos encanta la idea de ser capaz de motivar a otros. La idea es buena, pero no siempre está claro cómo lograr esto dentro de la rutina de trabajo que algunos llegan a odiar ¿Cómo un empresario puede lograrlo?
Los métodos tradicionales - un aumento de sueldo, por ejemplo- producen resultados mixtos. Si queremos una fuerza laboral comprometida, el dinero no es claramente la respuesta. De hecho, si queremos que los empleados sean felices con su sueldo, el dinero no es la respuesta. En pocas palabras: el dinero no compra la motivación, sólo la finge.
Así que si la evidencia es convincente y el aumento de sueldo no motiva ¿Qué hacer? La ciencia nos dice que la motivación intrínseca, cuando tenemos interés o disfrutamos de una tarea, es lo que realmente impulsa la satisfacción en el trabajo. Dan Pink, autor del libro Drive: La sorprendente verdad acerca de lo que nos motiva a nosotros, dice que hay tres factores clave de motivación: autonomía, maestría y propósito.
El problema es que la mayoría de la gente no sabe cómo crear la motivación intrínseca para sí mismos, y mucho menos ser capaz de preguntar por ella a los demás. Por otro lado, como jefes, motivar a un empleado es tan difícil que muchos dejan ese problema debajo de la alfombra. Inculcar maestrías y propósitos parece demasiado sentimental, y dejar a un empleado trabajar con autonomía puede ser aterrador.
En base a esto, existen una serie de preguntas sencillas - creadas por la estratega Laura Garnett, que pueden hacer que la tarea de motivar a los empleados sea más estandarizada y gestionable. Trate de preguntar a su equipo una vez al mes e invita al diálogo regular:
1. ¿Cuál ha sido la experiencia más emocionante de trabajo para usted este mes y por qué?
2. ¿Consideras que hoy tu trabajo es el ideal? Si no es así ¿Qué puede cambiar en la empresa para hacer la experiencia más agradable para usted en el proceso?
3. ¿Sientes que se consigue el propósito de nuestra misión y visión? Si no, dinos lo que le da sentido y cómo se puede aprovechar esa misión para nuestro negocio.
Use estas preguntas como un catalizador para la conversación. Deje que sus empleados tienen visto bueno para hablar con total libertad, no se puede mejorar la motivación y sin hablar de ello. Hay que hacerles saber que pueden para participar en la conversación y tienen el apoyo para hacer un trabajo mejor. Anímelos a venir a usted cada mes con ideas sobre cómo aumentar su interés y motivación.
Una conversación servirá de catalizador para los empleados se motiven sí mismos con los objetivos de la empresa en la mente - que, al fin y al cabo, es su objetivo también.
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