Cuándo suena la alarma en la mañana sólo tienes dos opciones:
1.- Apagarla de inmediato, levantarte inmediato de la cama y comenzar así un gran día.
2.- Apretar el botón "Snooze", volver a poner la cabeza en la almohada y despertar una hora después, atrasado y con todo el cuerpo cansado.
¿Qué opción aplicas siempre? Lo más probable es que tu caso, y el de muchos, sea el número 2. Es innegable que todos amamos nuestras horas de sueño y estar un ratito más en la cama es un placer culpable, sin embargo, esto es lo menos conveniente para nosotros, y a pesar de que disfrutemos 15 minutos más en la cama, el resto del día será completamente agotador.
Bueno, como todo en la vida tiene solución, estos son algunos consejos para pasar del caso 2 al 1 sin sufrir en exceso:
1.- Dormir de forma correcta:
Para despertar renovado, debes conseguir una buena noche de sueño Esto significa que, en primer lugar, debes evitar cualquier cosa con cafeína durante la tarde y por la noche, obviamente por su efecto estimulante que te mantendrá con insomnio.
Otra forma de lograr una buena noche de sueño, es mantener tu pieza fresca. El cuerpo reacciona frente a temperaturas altas o bajas y se adapta a ellas. Si el clima no es natural, nuestro sistema se mantendrá despierto a modo de alerta. Por eso es necesario que haya una temperatura fresca para poder conciliar el sueño.
Tampoco debes hacer ejercicio cerca de la hora de acostarse. La actividad física activa tu cuerpo y lo prepara para un día intenso, pero lo que de verdad quieres hacer es dormir ¿o no? Es ilógico realizar algún tipo de entrenamiento en la noche
Por último, aléjate de cualquier aparato electrónico - mejor dicho, lejos de cualquier pantalla iluminada - una hora antes de acostarte. La luz hace que tu cerebro piense que es de día.
2.- Siempre levántate a la misma hora, incluso los fines de semana
Independiente de qué tan bien duermas, qué tengas que hacer en el día o a qué hora te acuestes, siempre despierta a la misma hora. Nuestro ritmo circadiano -o biológico-, es un proceso en casi todos los seres vivos que le permiten al organismo mantener una rutina y funcionar mejor.
No todo el mundo necesita ocho horas de sueño. Nuestro cuerpo nos avisará cuándo debemos ir a la cama y cuándo ya se siente en condiciones de despertar ¿Te ha pasado que muchas veces te despiertas un poco antes que suene la alarma? Eso es porque nuestro cuerpo ya está acostumbrado a la rutina. En estos casos, también habrás notado que cuando abriste los ojos de forma natural, no te sentías cansado, pero cuando volviste a caer dormido y te despertó el sonido de la alarma, automáticamente sentías mucho sueño.
La rutina general te ayudará a conseguir el sueño saludable que necesitas para reponer tu energía.
3.- No apretar el botón de siesta
Ponga tu despertador a la hora en que verdad quieras levantarte y quédate con eso. Golpear el "Snooze" una y otra vez sólo te lleva a cortar el ciclo de descanso que seguía tu cuerpo, por lo que luego de la "siesta" sentirás como si hubieras dormido sólo 15 minutos, porque tu organismo lo siente así.
Si no puedes confiar en ti mismo no vuelvas a dejar esa opción. Mejor, deja la alarma lejos de ti y siéntete obligado a levantar el cuerpo de tu cama por unos días. Lo terminarás haciendo de forma natural.4.- Toma agua al despertar
Se pierde una gran cantidad de líquido cuando se duerme y respira por la noche, y por desgracia, la deshidratación puede hacer que andes con mucho sueño y reacciones lentamente. Tomar agua rápidamente te ayudará rápidamente a estar alerta. Esta es la solución mágica a tus problemas de sueño.
5.- Busca la luz
La luz es la señal principal que influye en los ritmos circadianos, porque encienden y apagan los genes que controlan nuestro reloj interno. Por lo tanto, apenas despiertes, mueve las cortinas y recibe con felicidad un nuevo día de sol.
Si no puedes recibir luz natural en tu pieza, busca una alarma que un poco más brillante, algo que simule un amanecer.
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