A menudo nos tomamos un negocio de la forma más seria posible, dejando lo humano para cuando llegamos a la casa. Así, la mayoría de las decisiones las tomamos en base a lo que dice nuestra cabeza, en lugar de lo que dicta nuestro corazón. Los líderes de una empresa tienen una posición ideal para dar humanidad, cercanía y un ambiente familiar al lugar de trabajo. Entonces ¿Por qué no usar este maravilloso poder para el bien?
Para poner a la gente antes que el trabajo, hay muchas formas. Incentivar la creatividad, la iniciativa y la productividad, se pueden lograr de las siguientes formas:
1.- Conecta el trabajo con una misión
Si no sabes a dónde vas, cualquier camino te llevará allí. El líder que trabaja con el corazón, es un maestro en adivinar la misión de una organización y luego desarrollar una visión que sea inspiradora para todo y cada uno de los empleados. Un liderazgo humano da a entender a los trabajadores que no tienen que cumplir con su labor sólo por presión o para recibir un sueldo a fin de mes, sino que deben hacerlo para alcanzar un propósito, completar una historia, una misión.
El trabajo del liderazgo hoy en día no es sólo para hacer dinero, es para dar un significado al trabajo de todos.
2.- Comunica
Los negocios están construidos sobre una base de sólidas relaciones dentro y fuera de la organización. Esto hace que la comunicación sea de dos vías, o sea, un verdadero diálogo con la gente ¿Alguna vez tu jefe o tú, si eres líder, ha dado los espacios suficientes para que la relación de trabajo no sólo sea dar órdenes, sino pedir opiniones?
Los mejores líderes motivan para que exista un flujo abierto de ideas en toda la organización y romper las barreras entre empleados y jefes.
3.- No dejar a ningún empleado atrás
"Ninguno de nosotros es tan inteligente como todos nosotros". Todos los empleados son una fuente de ideas ilimitadas sobre cómo mejorar los productos de la organización, procesos de trabajo y sistemas. La mayoría de los empleados sólo tienen que ser invitados a participar, y ellos tomarán acciones sin pensarlo. Sin embargo, la participación de los empleados sólo funciona en un ambiente de confianza total e incondicional. Por lo mismo, sin se deja atrás o se da menos importancia a un trabajador, no sólo él lo sentirá, sino el resto de sus compañeros, creando un ambiente nocivo.
4.- No sólo invites a que los trabajadores tengan un equilibrio entre vida y trabajo, insiste en ello.
En el pasado, las empresas exigían eran como sanguijuelas que absorbían gran parte de la vida de todos sus empleados. Los jefes antiguos eran vampiros que devolvían a sus hogares a unos padres y esposos totalmente deplorables. Hoy en día, las personas que dirigen las empresas más exitosas han aprendido que ayudar a los trabajadores a equilibrar sus vidas en el trabajo y fuera de él crea un ambiente sano, con menos estrés, mucha mayor productividad, y disminuye las renuncias. Esa es una receta segura para un mejor resultado final.
5.- Compartir la riqueza
En primer lugar, si usted desea atraer y retener el talento, tienes que pagar por ello. En segundo lugar, si deseas que ese talento trabaje con entusiasmo tienes que darle valor a la persona. Al compartir la riqueza con tu gente (a través de un salario competitivo, bonos de desempeño y similares), se crea un piso que atraerá a cualquier empleado.
6.- Diviértete más
Los empleados que se divierten en el trabajo son los empleados felices, quienes también son los más productivos. No sólo eso, investigaciones demuestran que la diversión restaura la inmunidad, eleva las endorfinas y reduce las enfermedades y ausencias laborales ¿No se te ha ocurrido nada divertido que hacer? Considere la posibilidad de invitar a los trabajadores a crear un equipo deportivo (fútbol, basquetball, lo que sea), hacer comidas al aire libre, crear días temáticos o concursos improvisados.
7.- Cree en el poder de uno
Cuando usted dirige con su corazón, ten por seguro que otros sentirán eso, tanto dentro como fuera de la organización. Poner a la gente primero es la clave para desatar todo el poder y la creatividad de los equipos de empleados, además fortalecerá relaciones más estrechas y productivas con los vendedores y proveedores. Una persona puede hacer toda la diferencia en el mundo, y hay muchas razones para que esa persona seas tú.
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