¿Cómo fueron tus primeros carretes universitarios?

¡Uffff! Cómo no olvidar esos carretes cuando entré de mechón en la universidad. Bueno, de recordar no mucho, porque, ejem…bueno, entenderán. La cosa es que no importa quién seas, ni cómo seas, las primeras fiestas de universidad son una de las cosas que más quedarán en ti cuando te titules y des el cierre a esta época.

Cuanto te dicen que la universidad es nuevo mundo no es mentira, y eso queda demostrado también en los carretes. Si el mechoneo es un ritual típico de muchos, los mambos mechones son misas sagradas a las que todo fiel estudiante debe ir, sin importar que tan bueno para la fiesta sea.

¿Qué puedes esperar de los primeros carretes universitarios?

Primero, prepárate para hablar de todo. Desde equipos de fútbol hasta el Papa, de la farándula hasta sobre  los Illuminati. De los Wachiturros hasta The Beatles. En tu carrera te encontrarás con una cantidad de gente tan diversa que terminarás haciéndote amigos de personas con las que nunca jamás en tu vida pensaste que ibas a relacionarte.

Una regla de la universidad es que salir con “luca” alcanza para toda la noche. Todo es barato y así va a ser durante toda tu estadía. Por ejemplo, en el carrete mechón que armaron en mi carrera, pagabas 500 pesos y te daban un vaso para llenarlo de cerveza hasta que tuvieras el estanque repleto o hasta que te llevaran en brazos a la casa (no me pasó a mí, le pasó a un amigo). Algo así será con lo que ustedes se encontrarán también. 

En esa misma onda, no sólo los carretes organizados por la universidad o tu carrera serán una alabanza a los precios populares, también lo será todo local que tenga el honor de ser llamado un “bar universitario”.

¿Qué más puedo recordar de mis primeros carretes universitarios? Ah, que debes ser un superhombre/supermujer. Generalmente, las fiestas comienzan súper temprano, onda después del almuerzo, y no por empezar a esa hora terminaran luego. Para nada. Serán hasta el otro día. Hay que armarse de valor para cada evento de la U.

Otra cosa que entendí en mi primer semestre universitario fue que no hay respeto por la semana. No hay diferencia entre un viernes en la noche y un lunes en la tarde (teniendo una prueba para el martes) para irse a celebrar. Todo horario es el ideal para salir a carretear y seguir acrecentando la amistad con los compas de carrera. Así que si un amigo te dice durante una ventana de clases ¿Vamos a tomarnos una chela? Sería una falta de respeto que dijeras que no. Como plus, recuerda que carretear dos veces a la semana hace bien para la salud.

Un carrete universitario no necesita motivos para llevarse a cabo. Ya sea que a todos les fue mal en un certamen, alguien está de cumpleaños, alguien está de santo o simplemente por celebrar un nuevo día, toda excusa es perfecta en tu primer año. Disfruta, en serio. Nadie te dice que te emborraches ni que te vuelvas loco, sólo aprovecha cada instancia fuera de la universidad para realmente vivir esta nueva etapa de tu vida que, en serio, será la mejor que pasarás.

Finalmente, debes tener en claro lo más importante: hacer amigos. Los primeros carretes son la mejor oportunidad para conocer a fondo a las personas. La buena onda está en el aire estos días y es la instancia ideal para entablar amistad. De hecho, da lo mismo que seas tímido, porque el ambiente te va a rodear de gente sin necesidad de iniciar una conversación. Unos minutos en el carrete y ¡paf! estás metido en un grupo de nuevos amigos y ni te diste cuenta.

Lo anterior me pasó a mí, terminé haciéndome amigos de todo tipo de gente, sin importar estilo, gusto musical, parada política. Nada. Las peleas no existen, al menos que se le pase la mano a alguien. Pero en serio, nunca había visto un ambiente tan buena onda cómo los que se arman en los recibimientos y carretes mechones. Así que, novatos, no tengaís miedo.

Piensa que los primeros carretes universitarios son como un paseo de curso. Van a un lugar entrete. Todos se vuelven más amigos. Hay música la "raja" y la pasan bien. A todo eso, agrégale que ahora son mayores de edad y la libertad está a flor de piel ¿Suena bacán? Sí, lo es, así que prepárate para la mejor época de tu vida.

¿Ya pasaron por sus primeros carretes? ¿Qué recuerdos tienen de ellos?

Foto CC vía Flickr