Desde hace unos 10 años, llegué a sector con la idea de conocer un poco más la gastronomía de nuestro país. En esos años, el Persa Bío Bío no era lo que es ahora, quizás era un poco más familiar, donde llegabas donde el casero para encontrar ese número perdido de la revista Barrabases, o quizás para conocer las revistas que leían mis abuelos.
Es así como después de harto tiempo, volví a la esquina de San Isidro c/n Franklin, para recordar estos sabores y compartir mi experiencia con ustedes. El lomito es uno de sándwich más popular en Chile, basta ver como a principios de los 90, la cadena Lomitón entregó sus mejores recetas para los paladares nacionales, pero todavía tenía un dejo de comida rápida, por esto lo importante era que los ingredientes fueran más criollos y de esta forma llegué a mi primera parada, La picá del Jaime.
El lugar más grande de la cuadra es el de Jaime, la plancha rebosante de carne emana el olor característico de estas cocinerías, el lomito bota su jugo y ya está listo para posarse en una marraqueta del día, fresca y crujiente. Lo recomendable es pedir el lomo solo con bebida, junto con la mayonesa casera, con huevos pasteurizados y con ese toque de ajo que la hace especial. Al llegar a tu mesa, no sabrás como tomar semejante sándwich, así que recomiendo que vayas con la idea de ensuciarte las manos y dejar que tu paladar disfrute esta delicia gastronómica criolla.
Para cambiar el sabor de la comida, pasé a la otra esquina de San Isidro, donde puedes encontrar una variedad de bebidas, nacionales y extranjeras, las quepara los coleccionistas son tesoros. Debo confesar que aquí también encuentro mi placer culpable del persa, el Sorbete Leterier.
Volví a Franklin, con la idea de probar algo distinto, más gourmand así que pasé por el famoso y renombrado Lai Thai, donde bajo las órdenes de Mr. Odd, se popularizó una comida desconocida para los paladares de este sector de Santiago, pero que en menos de 3 años, replicó el formato de las cocinerías tailandesas, donde la comida al paso es la reina, por lo que, sus platos son de consumo rápido, para que pase el próximo cliente. El plato más conocido es el Pad Thai, un plato de fideos de arroz, con huevo y camarones, pollo, tofu y salsa de tamarindo, además del nunca bien ponderado curry. Recomendación,vayan preparados para conocer otros sabores, un poco más picantes de lo normal, pero que con una rica bebida, pueden pasar.
Para el problema anterior, pueden pasar altiro a la picada de jugos que está al lado del Lai Thai, donde por 1500 pesos puedes crear tu propio jugo, que sirve para pasar el picor de la comida que recién probamos.
Saliendo de este sector, caminando hacia Placer esquina San Isidro, pueden entrar a los clásicos galpones que dan el nombre a este sector, llegando a la picá de empanadas Donde Juanito, la cual ofrece empanadas de varios tipos (mi favorita es la de queso con camarones), a precios accesibles y además bebidas familiares, las cuales rinden si vas con más personas.
Bajando por Placer, ya pasado San Francisco, emprendo rumbo a mi hogar, no sin antes deleitarme con el último plato que probaré en esta crónica, llegué al local del Rey de la papa rellena, quién también se proclama con el rey del choclo con mantequilla, pero con el calor que hace, es más rica una de las primeras, con bastante salsa y mayonesa, me refrescaron las papilas gustativas, para volver a descansar y comenzar esta nota, tratando de plasmar los sabores e invitarlos a probar estas maravillas del Barrio Franklin.
¡No se arrepentirán!