¿Qué puede aprender un emprendedor de Breaking Bad?

Si vieron la popular, majestuosa, tremenda y ganadora serie Breaking Bad, entenderán que, de cierto modo, Walter White fue un gran emprendedor. Si lo pensamos bien, el tipo se la jugó por su idea y se lanzó con un negocio, no del todo legal, pero básicamente es un proyecto igual.

La historia de un profesor de química que decidió dejar de lado la profesión para producir y vender metanfetamina, parece estar muy lejos de dejar una enseñanza, pero hay que verle el lado positivo a la historia y reconocer que algo se puede aprender de Mr. White.

Claramente a hablar de la química, ni del mundo delictual, ni del tráfico de drogas directamente, ni les voy a recomendar ese tipo de vida, obviamente, pero una historia tan maravillosamente creada, obviamente dejará algo de utilidad en quienes la vimos.

Sí, es posible encontrar enseñanzas para los emprendedores en Breaking Bad y aquí les voy a recomendar algunas:

1.- Para resolver problemas, piensa creativamente 

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El principal problema de Walter White, en un comienzo, era encontrar el dinero para pagar su tratamiento y mantener a su familia lo suficientemente bien para que no faltase nunca nada. Para eso, se le ocurrió una solución muy creativa mediante la experiencia y lo que vio en su entorno.

La creatividad para crear y solucionar cosas es clave para que clientes y empleados confíen en ti. Cuando en la serie vieron que Walter creó un producto totalmente distinto a lo que ya estaba en el mercado, volcaron su atención hacia él y así fue como el negocio anduvo viento en popa.

Clave en la creatividad también es ir evolucionando. Cuando una idea ya esté venciendo o una vía ya no sirva, debes tener la capacidad para cambiarte y adaptar.

2.- Trabajar con profesionales

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Si quieres un negocio exitoso, tienes que rodearte de personas importantes del mercado en el que te desenvuelvas. Busca a profesionales y no te quedes con lo mediocre. Tal cual le sucedió a Walter con su primer distribuidor, Tuco, quien terminó siendo demasiado amateur para las aspiraciones del señor White.

Si estás trabajando con clientes poco profesionales, eso se verá reflejado en tu negocio y serás de poca confianza, así que asegúrate de establecer conexiones de calidad y enriquecedoras - esto reducirá el riesgo de que algo salga mal - y no termines "matando" a alguien por su falta de seriedad.

En definitiva, debes eliminar la mayor cantidad de riesgo posible de su servicio.

3.- Haz lo que amas, que en eso serás siempre bueno

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Walter White se dedicaba a la docencia de química porque ama esa materia. Cada vez que hacía experimentos se notaba que el tipo disfrutaba haciéndolo y por eso decidió a realizar un negocio en donde pudiese utilizar sus talentos.

Al convertirte en un especialista en tu área de conocimiento, un emprendedor puede perfeccionarse rápidamente y crear un negocio que prospere con velocidad. El truco es llegar a ser extremadamente competente y bien considerado en esa disciplina en particular y así la gente confiará ciegamente en ti, sólo por tu nombre y lo que eso conlleva, lo que le permite construir tu negocio rentable y sostenible.

4.- Ser diferente

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Todos los grandes empresarios saben que si ofrece un producto superior, eres el ganador, no importa el precio. Ya sea que estés vendiendo metanfetamina de cristal ilegal (espero que no, porque tendrás muchos problemas) o tengas en mente un nuevo producto para el mercado legal, asegúrate que lo puedes definir y diferenciar del resto de la competencia. Busca ese detalle que nadie tiene y que puede ser el escalón que falta para llegar al Olimpo. Walter lo hizo con su producto azul.

6.- La marca y la imagen importan.

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Los fanáticos de Breaking Bad entenderán el verdadero valor que tenía el nombre Heisenberg en el mercado de la metanfetamina, así como su sombrero y el color azul del producto que creaba. Todo eso era una imagen de la marca que Walter White había creado y que lo sirvió para identificarse. Su producto partió en un estado y luego se masificó a todo los Estados Unidos, y allá donde estuviera era reconocida la metanfetamina cuando era creada por el señor White. Así de simple, una marca vale mucho más de lo que piensas.

Así que emprendedor, cuando crees tu nuevo producto, piensa bien en su marca y la imagen que darás de ella a los clientes, porque eso puede llevarte al éxito inmediato.

7.- Diviértete

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Siempre tienes que dejar un pequeño espacio para la diversión. Este es un consejo para empresarios y empleados. Sino miren a nuestro querido Jesse Pinkman, quien en un principio se tomó el negocio de la metanfetamina de la forma más simpática posible, a pesar de que era un trabajo extenuante y donde pasabas la mayor parte del tiempo encerrado ¿Les parece historia conocida?

Foto CC vía Flickr