El sueño es uno de nuestros principales enemigos cuando estamos en el trabajo y muchos deben aguantar horas entre bostezos sin poder "pestañear". Obvio, siempre existe el temor de que decidas tomar una siesta "cortita" y justo aparezca el jefe para arruinar nuestros planes (y algo peor, probablemente).
¿Qué podemos hacer si el sueño es inevitable? Lamentablemente, muy pocos trabajos aún consideran la siesta como una parte importante de la vida de los trabajadores, por lo que debemos crear formas ingeniosas para lograr tener esos minutitos de sueño que tanto anhelamos.
¿Cómo podemos dormir en el trabajo de forma "ninja"? Ojo con los siguientes útiles (y humorísticos, obviamente) trucos:
1.- Stickers para los ojos
El viejo truco que no pierde su esencia. Desde el inicio de los tiempos, está técnica se ha ido perfeccionando desde su comienzo con rústicos dibujos hasta la impresión de realísticos stickers en 3D. Un clásico que nunca está demás recordar.
2.- El dolor de estómago y la estadía eterna en el baño
Antes de utilizar el baño como lugar para dormir, primero debes fingir que tienes un dolor de estómago insoportable, provocado por la comida de ayer "que te cayó mal" o si eres capaz de decirlo, por una fiesta excesiva (no te pueden juzgar, igual llegaste al trabajo). De esta forma, nadie se extrañará cuando lleves más de 10 minutos en el baño, de hecho, tratarán de estar lo más alejado posible de ti. Mientras, tú plácidamente recuperas el sueño perdido.
Si tiene el sueño pesado, recuerda poner la alarma, aunque de esa forma también podrías alertar a las personas de que no estabas precisamente "solucionando" tu dolor estomacal.
3.- El pensador
Otra técnica usada por los atletas (del sueño) de alta competencia es el llamado "pensador", en honor a la estatua de Auguste Rodin. La técnica aquí es sencilla, sólo debes apoyar tu cabeza sobre tu brazo, tal cuál estuvieras soportando un dolor de cabeza, y dedicarte a dormir. Si tienes suerte, los demás pensarán que estás pensando en algo muy importante y no deben interrumpir tu trabajo por ningún motivo.
Si te llegan a interrumpir, "enójate" y diles que justo estabas encontrando la respuesta a la pregunta que tanto te había costado resolver. Qué indignante.
4- Bajo el escritorio
Si tu lugar de trabajo goza de una posición estratégica, puedes tomar ventaja de ello y "echar una siestecilla" rápida bajo el escritorio. Si estás bien posicionado, la gente probablemente pensará que estás en el baño o saliste a comprar algo.
Si te llegan a pillar durmiendo, ten cerca algo pequeño botado, como lentes de contacto, y asegura que simplemente estabas buscándolo, pero que te ha sido difícil encontrarlo. No apliques este truco para siestas largas, para eso está el truco del baño.
5.- Y...bueno...esto!
No sé qué decir al respecto, pero si lo encuentran una solución factible ¡No se guarden las ganas!