La empresa Randstad, dedicada a los Recursos Humanos, elaboró una encuesta que demostró que ocho de cada 10 trabajadores cree que la relación con el jefe tiene un gran impacto en lo felices que son con su trabajo. A raíz de eso mismo, el informe también arrojó que la razón principal de por qué la gente dice "renuncio" a su empleo es, precisamente, el jefe.
Cuándo tus intereses y metas con el trabajo no coinciden con las de tu jefe hay dos opciones: aguantar hasta ya no poder más o ir directamente al "yo renuncio". Por ejemplo, cuando un trabajador que necesita la independencia se encuentra con un jefe que respira en tu nuca, la situación laboral nunca funcionará.
Los empleados ponen una gran cantidad de fe en sus directivos: el 67% de ellos sienten que su jefe o supervisor directo tienen mejores intereses en mente cuando reconocen sus habilidades y ayudan en sus carreras, dando a entender que los líderes son muy influyentes en el rendimiento de los trabajadores.
Un resultado muy importante de la encuesta es que el 53% de los trabajadores piensa que podrían realizar un trabajo mejor que el de sus jefes, esto pensando también en que los empleados desconocen totalmente las obligaciones y responsabilidades del empleador.
En resumen, tener un jefe que no vea a la empresa de la misma forma que tú, que no sea un apoyo para avanzar en tu carrera y del cual no sientas el respeto necesario para confiar en su liderazgo, es el principal motivo para tomar la decisión de renunciar.
¿Qué pueden hacer los jefes al respecto?
- Los empleados son más felices cuando el jefe tiene una buena relación con ellos. Los empleados felices tienden a ser productivos, por lo que trabajar en la construcción de una buena y sólida relación hará valer todo el tiempo invertido. Ahora bien, no hay que confundir una buena relación jefe-empleado con el tipo de relación que tienen amigos. Ellos son diferentes.
- Promover las habilidades de los empleados. Si hay talentos en el equipo, hay que lograr que ellos lo sepan. Algunas veces es mejor privilegiar a algunos empleados, a los que realmente aportan en la oficina. Hay que considerar que tener un mejor empleado significa una mayor ganancia. Asimismo, mejores beneficios significan un bono más grande para ellos.
- Ser Jefe no es ser el mejor, menos perfecto. Un empleador siempre debe estar dispuesto a que sus empleados puedan tener una idea mejor que ellos y aceptarlas. Debe saber que así como el es un experto en liderazgo, los trabajadores son mejores que ellos en otras cosas. Todo el mundo, sea jefe o empleado, tiene espacio para el crecimiento y el desarrollo.
Foto vía: TheChive