El sueño de tener un negocio propio es el deseo de muchos y muchas. Pero como sabemos, es una difícil tarea porque involucra riesgo, inversión de dinero, tiempo, esfuerzo, y también conseguir un buen compañero/a de empresa. Es el denominado socio que muchas veces necesitamos para complementar características y esfuerzos a la hora de entablar un proyecto propio.
La elección de buenos socios es fundamental para tener éxito en una empresa personal. Debes tomar en cuenta que trabajarás codo a codo con esa persona, se verán muchas horas al día, y eventualmente podrán tener desencuentros. Lo importante es tener en claro el objetivo en común que se trazaron.
En primer lugar, es necesario tener en cuenta las habilidades y las competencias de cada uno. El objetivo es complementar fortalezas y aunar criterios para el objetivo planteado, y para esto se debe tener claro cuáles son esas características de cada uno de los posibles socios. Por ejemplo, si deseas emprender, y no tienes características ni los conocimientos en informática, debes buscar a una persona que satisfaga esas necesidades, y que pueda abarcar esa área. El conocimiento de los socios debe ser multidisciplinario.
Asimismo, se deben definir funciones y responsabilidades dentro de la empresa, todos esos puntos deben quedar claramente mencionados para no verse enfrentado a problemas posteriores.
Por otra parte, debe existir un respeto mutuo, en relación a las tareas a desarrollar. Cada socio tiene sus propias características y habilidades, y eso debe ser siempre respetado. El aporte de diferentes visiones y experiencias, y la valoración mutua de cada socio, es algo absolutamente necesario para conseguir el éxito en cualquier empresa.
Plantearse objetivos y caminos en común es de primera importancia. La idea es que los socios tengan un mínimo de proyección en común, con el objetivo de darle vida a la empresa. Esos objetivos deben estar claramente mencionados en la misión de la empresa para no tener problemas ‘editoriales’ a la hora de tomar decisiones. En ese sentido, nuestro socio(a) debe estar igual de comprometido que nosotros, y con una visión de la vida y del proyecto que vaya en una dirección similar.
Dentro de la creación de una empresa pueden aparecer obstáculos o circunstancias que pueden cambiar ciertos planes. Para eso, los socios deben estar dispuestos a flexibilizar ciertas posturas o decisiones antes tomadas. Se debe estar prevenido de posibles problemas o situaciones que hagan cambiar los planes.
También es importante trabajar a gusto con tu socio(a). Para enfrentar los momentos complicados y con adversidades, lo mejor es trabajar con alguien que sea un apoyo y no un problema más. Las relaciones humanas y de trabajo también se sustentan en la buena onda.
¿Cuál es tu experiencia?