La entrevista de trabajo es, sin duda, una situación tensa: ya sea porque requieres con urgencia encontrar una nueva ocupación o porque ansías iniciar nuevos rumbos, es una instancia para la que debes estar preparado.
Así como es importante que tengas claras tus fortalezas, también debes considerar cuáles son tus deficiencias o debilidades. Y sobre esto trata un artículo publicado por la revista Forbes, en el que se entregan diez consejos para profesionales, acerca de la preparación previa a una entrevista de trabajo, luego de haberse preguntado si eres el adecuado para el puesto, o si éste calza contigo.
1. ¿Cuál es la reputación de la empresa?: Es ideal averiguar sobre la empresa u organización para la que vayas a ser entrevistado. Esto puedes hacerlo a través de internet o con otras personas que ya forman parte de ella, si es que conoces a alguien. Los reclutadores creen que esto es más necesario aún cuando se trata de los sectores jurídico y financiero, pues en ellos suele haber más litigios.
2. ¿Cómo puedo cuantificar mi experiencia?: Es importante llegar a una entrevista con una cuantificación (expresión numérica) del rendimiento en las labores previas, pues ésta es una buena forma de demostrar los resultados obtenidos con tu desempeño, aunque no lo consulten directamente. No es bueno no estar preparado para este tipo de preguntas y responder con una excusa o aplazarla, diciendo que se resolverá la duda por correo o vía telefónica, pues esto es igual a decir que no sabes o no tienes la información.
3. ¿Cuáles son mis debilidades para este puesto?: Así como debes identificar y destacar tus fortalezas, también es importante saber y reconocer cuáles son tus debilidades, pues esto te dará ventajas cuando el entrevistador caiga en ellas. Asimismo, hallar una manera de abordar estas deficiencias y, de cierta forma, aprovecharse de ellas, para transformarlas en cualidades positivas o desafíos, es una característica positiva tuya para la visión del reclutador.
4. ¿Cuál es el posicionamiento de la compañía en su sector?: Conocer la actual situación económica de la empresa, así como el posicionamiento en el sector al que pertenece, son claves para entender cualquier ocupación que vayas a desarrollar en ella, que además te permitirán situarte mejor como un activo para mejorar esta ubicación.
5. ¿De qué habilidades diferenciadoras dispongo?: Para los encargados de selección, las entrevistas son una instancia para hallar candidatos que se diferencien de los otros, por sus habilidades particulares. Entonces, debes descubrir cuáles son las tuyas, para posicionarte y ser considerado como un mejor candidato para formar parte de la compañía, asunto que debes dejar claro en la entrevista.
6. ¿Qué estoy dispuesto a sacrificar para este trabajo?: Antes de ir a la entrevista, debes imaginarte en situaciones en las que debas sacrificar algo por el trabajo y saber hasta qué punto estamos dispuestos a hacerlo. Es importante tener clara una respuesta, por si hacen una consulta similar durante la entrevista.
7. ¿Qué espero obtener de esta oportunidad?: Debes saber por qué te interesa ocupar ese puesto, ya que es muy posible que sea una de las preguntas de la entrevista. Posible respuestas pueden ser: por el dinero, por la empresa, por las opciones de crecimiento, por aprender, etc.
8. ¿Quien estuvo allí antes?: Aunque no sea fácil de averiguar, es muy bueno saber que ocupaba antes ese puesto y el motivo de su abandono o despido, para saber a qué atenerse.
9. ¿Hay espacio para crecer?: Especialmente si el puesto está por debajo de tus expectativas, infórmate sobre las opciones de ascenso y la importancia de la promoción interna en la empresa, así como las posibilidades de traslado a otro país (si es que consideras esta opción).
10. ¿Me sentiré cómodo en este ambiente de trabajo?: Es importante compartir ciertos aspectos de la cultura de la empresa y tratar de saber si encajarás en el ambiente (si hay personas con las que tendrás buena relación, de las que podrás aprender y con las que tendrás ganas de compartir gran parte de tu día).