Las grandes ciudades suelen tener el problema del transporte público. En nuestra capital el Transantiago no entrega un servicio de calidad, existe una sobreabundancia de automóviles y el combustible cada vez es más caro. Ante este escenario el uso de la bicicleta aparece como una opción económica, ecológica y saludable.
Tomando en cuenta la masividad de las grandes urbes, el Gobierno de la ciudad de Buenos Aires acaba de aprobar una ley que obliga a los organizadores de eventos masivos (recitales, deportivos y shows) a disponer de la infraestructura necesaria para otorgar el servicio de estacionamiento de bicicletas.
La ley explica que “la Ciudad de Buenos Aires es sede de numerosos eventos masivos, ya sean culturales, deportivos, musicales, entre otros. Estos eventos suelen atraer grandes cantidades de público, con las consiguientes dificultades de tránsito en la zona en la que se realizan. Por este motivo resulta necesario promover alternativas que contemplen este medio de transporte emergente en nuestra Ciudad, de modo de contribuir a un acceso y egreso ágil y rápido que beneficie tanto a los asistentes como a los vecinos que habitan en las zonas aledañas a los espectáculos masivos, al mismo tiempo que reduzca la carga del transporte automotor sobre calles y avenidas”.
De acuerdo a la ley, los espectáculos masivos en la capital trasandina que tengan más de dos mil asistentes deberán tener espacios definidos, con la infraestructura necesaria para estacionar bicicletas.
Asimismo, los organizadores de los eventos deberán señalizar correctamente el espacio delimitado para los estacionamientos y disponer de personal de seguridad para la vigilancia y el control de la entrada y salida de las bicicletas mediante tickets de control. Los estacionamientos, que serán temporales, deberán tener un espacio para cada bicicleta, y tendrán que estar disponibles tres horas antes y tres horas después del evento.
En la difusión de los eventos se debe comunicar la disponibilidad de los estacionamientos disponibles con la misma cantidad de información que los otros medios de transporte, la ubicación de los mismos y la obligatoriedad de los usuarios de portar su propio candado. Todo este servicio es gratuito.
Una señal que demuestra lo mucho que debemos avanzar en materia de transporte. La bicicleta es un medio de transporte cada vez más utilizado, y en Santiago se necesita una infraestructura vial acorde a las necesidades de la ciudad.
Pese a incitativas como los estacionamientos afuera del Costanera Center y de algunas estaciones del Metro, sin lugar a dudas parecen medidas insuficientes para el universo total de ciclistas del Gran Santiago. Esto debe ir acompañado de una política de transporte integral que incluya a la bicicleta como elemento fundamental al mediano y largo plazo.
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