No existe herramienta más útil que el lenguaje. Nos permite acceder y alcanzar muchísimas cosas e influye en todos los aspectos de la vida. Entre ellos, en la manera de relacionarnos, ya que es éste, el medio por excelencia para hacerlo.
Sin duda alguna, es de vital importancia poseer un “buen” manejo del lenguaje y no limitarse a su uso funcional, ya que como hemos mencionado en otras notas, no solo tiene una connotación comunicativa, sino también, una función estética que tiene impacto social. Por ejemplo, si conoces a una persona “X”, que te ofrece un producto “X”, esperarás que mantenga un “tipo de trato” contigo, lo que le atribuye cierta credibilidad. No obstante, si esa persona se acerca a ti y te dice algo como: ¡Buenas mi reina! o ¡Güena jefe! Probablemente cambiará la impresión y se modificará el rango de credibilidad frente a su postura. No se trata de un prejuicio sino de un estereotipo del cómo se debe usar el lenguaje en distintas instancias.
En relación a lo antes expresado, tenemos que el lenguaje es factor para la innovación y el cambio, ya que el poder de una palabra y de un uso comunicativo efectivo tiene altas repercusiones en las personas (como lo visto en los ejemplos). Recordemos grandes lemas empresariales que han llevado al éxito rotundo de proyectos comunes, como lo dicho por Henry Ford: “Haré un auto para todo el mundo” o Steve Jobs: “Piensa diferente”. Ellos, hicieron una transformación en el modo de comunicar sus ideas, lo que trajo consigo la consecución de sus anhelos. Diferente hubiera sido, si ellos hubieran expresado ideas como: “Haré un auto que solo podrán tener los ricos” o bien “No trates de pensar diferente, piensa como todo el mundo”, sin duda, el uso estratégico de lemas repercutió en alcanzar sus metas.
Es por esto, que el lenguaje tiene una gran importancia para la innovación y el cambio, todo depende de cómo se diga. Y nunca dejes de considerar el poder que tiene UNA PALABRA.
¿Consideras que es importante el lenguaje para la innovación y el cambio?