Hay días en los cuales las ideas fluyen y hasta es necesaria una libreta para anotar todas las que se nos ocurren. Pero en otras ocasiones, sentados frente al computador, lo único que se nos presenta con insistencia es una hoja en blanco. O en una reunión el silencio reina y a nadie pareciera que se le ocurre nada muy bueno. ¿Qué se puede hacer con el bloqueo creativo? Breakthrough!: 90 Proven Strategies to Overcome Creative Block and Spark Your Imagination es un libro que nos ayuda a encontrar más de alguna respuesta. El autor, o mejor dicho compilador, es Alex Cornell, un diseñador y músico que hace un par de años tuvo precisamente lo que se conoce como un bloque creativo. Lo paradójico es que justo se encontraba escribiendo un artículo sobre el mismo tema. Así que decidió buscar textos que hablaran sobre ello, empezando por los escritores que más le gustaban.
¿El resultado? Su búsqueda superó las expectativas y terminó compilando el libro antes mencionado, el cual armó en base a una serie de estrategias que han sido utilizadas de forma exitosa no solamente por escritores, sino también por diseñadores, filósofos o artistas.
Por ejemplo Daniel Denett, filósofo, comparte la rutina que le ha resultado para terminar con un bloqueo, y que ya forma parte de su proceso creativo cotidiano. Dennett, en vez de quedarse frustrado en su escritorio, sale a su granja, corta la leña o realiza alguna actividad manual. Al realizar esto, le surgen ideas o perspectivas novedosas que refrescan su trabajo intelectual.
“Involucrar mi cerebro con algo más en que pensar y controlar me ayuda a derretir los bloques que me impiden progresar, liberando los circuitos para nuevas vías”, dice el filósofo.
Por su parte, el escritor Michael Eard también recomienda hacer algún otro tipo de trabajo como tomar notas, leer o meditar. “Si tienes sólo un canal, sólo un conducto, entonces eres vulnerable al bloqueo”, explica, recurriendo a metáforas de irrigación para dar a entender que cuando un canal se bloquea, es necesario ocupar otro.
Mientras que Douglas Rushkoff, un conocido teórico de los medios y de la cultura virtual, declara no creer en el bloqueo creativo. Para Rushkoff cuando una persona no se encuentra escribiendo, porque aparentemente no puede hacerlo, el cerebro mientras tanto trabaja en otros aspectos, recolectando información.
Y es que el proceso creativo tiene más de un aspecto. Uno de estos se podría ver en el montaje de una película, en la resolución de una ecuación, mientras se pinta o se teclea con efusividad, ejemplifica Rushkoff. “Pero también está la parte que pasa invisiblemente, debajo de la superficie. Es ahí cuando los sentidos están percibiendo el mundo, la mente y el corazón entran en un tipo de disonancia, y el alma escoge responder”, agrega.
En general, el libro entrega ciertos parámetros comunes para vencer el bloqueo creativo. Además de darle tiempo a la mente para que divague y trabaje de forma inconsciente, se recalca la importancia de la salud, especialmente dormir bien. Asimismo, es recomendable tomar un libro e inspirarse en las ideas de grandes escritores, o simplemente dejar de centrarse tanto en la mente, y recurrir a alguna actividad que también haga trabajar a nuestro cuerpo.