Porque no hay primera sin segunda, y muchos quieren la revancha, no podíamos olvidar las usuales características de los hombres universitarios. Porque hay que aceptarlo, muchas mujeres mueren por ellos, pero no saben lo positivo y negativo que puede haber tras una linda sonrisa. Por eso, para amarlos hay que mantenerlos identificados. A continuación te mostramos los prototipos más típicos de los casi príncipes azules.
En primer lugar está el jote quien es la frase hecha persona del “que la sigue la consigue”. Es el que primero partió como amigo y poco a poco, entre conversa y conversa, se te declaró. Aunque esto de salir de la friendzone no muchas veces resulta, sí puede concluir en un muy buen pololeo, piensa que después de todo el tiempo que gastó en conquistarte, es muy probable que quiera algo serio.
Por otro lado, encontramos al galán el cual se convierte en el más peligroso. Piropero como él solo, sabe exactamente qué decir y cómo sacarte una sonrisa picarona sin que te des cuenta. Es amable, preocupado y atento, pero tiene un gran problema. Lo más seguro que tome a las mujeres como capricho y a la primera se vaya detrás de otra.
También, puede ser que quien gane tu corazón sea el que te haga reír a carcajadas. Porque el simpático siempre es una buena opción, se lleva bien con tus amigas, tu familia y se adapta en toda situación. Es el que conoce a toda la universidad, con él jamás faltarán los panoramas. El único problema es si antepone sus carretes a estar contigo. Sobre esto comenta Constanza Tapia que tuvo una relación con un compañero de su carrera: “Él era muy simpático y bueno para la talla y eso me confundía ya que se sentía a veces más como una amistad que un pololeo”.
Tampoco podemos olvidar al geek, ese que anda con su consola y computador a todos lados. Se sabe cada videojuego que sale al mercado y por lo general, tiene amigos de la misma onda. Este tipo es perfecto para las más regalonas y tranquilas, pero una lata para las que prefieren salir a carretear antes que todo.
El caballero es el más parecido al príncipe azul. Es el que te abre siempre la puerta, te presta su chaqueta cuando tienes frío y te llena de obsequios. Está cien por ciento dedicado a ti ya que desde que empieza el cortejo te tiene como prioridad número uno. Perfecto para las que se quieren dejar querer, y un total desastre para las que ven su independencia como algo sagrado.
Aunque todos tienen algo encantador y algo totalmente desastroso hay que aceptar que no hay nada mejor que un buen pololeo con alguien que puedes ver cada día.
Y tú, ¿Qué tipo de pololo tienes?