Lo primero es lo primero. No mezclemos las cosas. Jamás se te ocurra linkear tu twitter o Facebook a tu Linkedin, sobre todo si -(sin ánimo de juzgar a nadie)- eres de esas personas que aman compartir su vida privada, las fotos de carretes o, simplemente, disfrutan despotricar a los 7 vientos digitales, desde lo lleno que va el metro hasta lo desagradable que te resulta el compañero de oficina. Esto solo saboteará cualquier posibilidad de nuevo trabajo que tengas a la vista.
Es un hecho. Cada vez son más las empresas y consultoras que utilizan información de las redes sociales para procesos de selección de personal. De hecho, una vez, en una pega antigua, sorprendí a un jefe revisando varias cuentas de Twitter de otros compañeros de trabajo (la mía estaba bloqueada) y le pregunté que qué hacía, su respuesta fue: “me gusta conocer a la gente que trabaja conmigo”. Miedo, ¿o no?.
En mercados como el de Estados Unidos, hay encuestas que sugieren que cerca del 30% de los empleadores está realizando este tipo de investigaciones. Mientras que en Latinoamérica esta práctica es incipiente, pero va en aumento.
En Chile, según los resultados de la primera edición del estudio Tendencias anuales en sueldos, beneficios y lugares de trabajo 2013 de la consultora multinacional de Recursos Humanos Randstad, las redes sociales ocupan un lugar privilegiado como medio para reclutar talentos, ubicándose en el tercer de preferencias de los ejecutivos de recursos humanos para encontrar profesionales.
“El uso de redes sociales en el reclutamiento de ejecutivos se remite, por ahora, sólo a los mandos medios, pues los procesos en el caso de altos cargos siguen siendo los métodos tradicionales de Hunting y la búsqueda a través de referidos”, asegura Sol Castro Lechtaler, gerente de recursos humanos de Randstad.
Estos datos coinciden con el estudio de la empresa de reclutamiento Robert Half International, el cual reveló que un 92% de los ejecutivos chilenos de recursos humanos usan las redes sociales para buscar personal y, entre ellos, el 38% recurre a Facebook y LinkedIn para comunicarse con el candidato.
El mismo análisis además precisó que el 45% de los perfiles publicados en Facebook y LinkedIn probablemente reemplazarán el tradicional currículum, mientras que el 40% de los ejecutivos reconoce las redes como una herramienta de selección.
Así que, no es por alarmarlos, pero ya saben, las redes sociales podrían terminar determinando nuestras oportunidades laborales. El mejor consejo es mantener lo que tiene que ser privado, en privado (no falta el poco astuto que extiende una licencia por enfermedad y después se pone a subir fotos desde República Dominicana, porque no se aguantó las ganas de alardear sobre su viaje con sus amigos).