¿Qué opinan los candidatos presidenciales sobre la educación?

La carta de salvación para los candidatos presidenciales puede ser la educación. Es por esto que “Educación 2020”, lanzó la nueva hoja de ruta de la educación, llamada “La reforma educativa que Chile necesita”, esta hoja fue enviada a los once candidatos presidenciales; Laurence Golborne, Andrés Allamand, Michelle Bachelet, José Antonio Gómez, Andrés Velasco, Claudio Orrego, Marco Enríquez Ominami, Marcel Claude, Franco Parisi, Roxana Miranda y Tomás Jocelyn Holt.

No todos tienen la misma opinión respecto a la temática, Michelle Bachelet declara que está en contra del lucro en la educación, sin embargo, una gratuidad absoluta sería injusta, pues el que puede pagar debe pagar, la libertad de pago, sería sólo para quienes “realmente” lo necesitan. En mayo la ex presidenta anunciará reales propuestas para la problemática.

No todos tienen la misma opinión respecto a la temática, declara que está en contra del lucro en la educación, sin embargo, una gratuidad absoluta sería injusta, pues el que puede pagar debe pagar, la libertad de pago, sería sólo para quienes “realmente” lo necesitan. En mayo la ex presidenta anunciará reales propuestas para la problemática.

Andrés Allamand, considera que la educación subvencionada debe seguir existiendo, pues los padres deben poder elegir en qué establecimiento se forma su hijo, esto como garantía de la libertad de enseñanza, en cuanto a las universidades, se opone a la gratuidad. “No es posible que el estado esté pagando por la educación de jóvenes de los cuales padres Sí pueden pagar por su educación”, señala Catalina Parot, vocera del comando del presidenciable RN.

Ominami cree en la educación gratuita para todos a lo largo de la educación primaria, secundaria y terciaria, para él, la clave está en una reforma tributaria. “El hijo de papá rico no es rico, por ende es el progenitor quien debe pagar, no el hijo, esto a través de los impuestos”, señala el candidato PRO.

El otro candidato que promete quedarse con varios votos, Franco Parisi, propone lo mismo que su par anterior, cree en una educación pública, gratuita y de calidad, a través del cobro de impuestos a las empresas que pueden y deben pagar, señala él. Acusa que los ricos tienen todo a nombre de una compañía, el auto, la casa, la empresa, etc. y esto, no puede ser posible.

Claudio Orrego, habla de la educación técnico profesional, la cual en su gobierno tendría prioridad, se apuntará a reales necesidades de la industria y se otorgarán becas de 100%, lo cual, según mi perspectiva, señala que no cree en educación superior gratuita, porque para una beca se necesitan costos. El representante DC agrega que, eliminar el lucro no es garantía para obtener la educación de calidad que Chile necesita, es fundamental avanzar en paralelo en otras áreas para fortalecer la educación pública.

Andrés Velasco, habla de un sistema único para todos los jóvenes del país, sin importar la casa de estudios en la que cursa su carrera. No cree en la gratuidad absoluta, pues sería seguir con las desigualdades entre jóvenes.

El ex ministro de varias carteras, Laurence Golborne, ha remarcado que su apuesta apunta a buscar la educación pública, gratuita y de calidad para todos los chilenos, desde la pre básica hasta cuarto medio" Sobre los niveles de gratuidad, Golborne ha señalado que la universalidad en la aplicación de este concepto sería "una falacia", y que las políticas de Estado deben apuntar a ayudar quienes no pueden costear sus estudios, superando la desigualdad "desde la cuna".

El senador radical, José Antonio Gómez, ha planteado que su propuesta apunta a una gratuidad total de la educación para todos los niveles educacionales. Al mismo tiempo, afirma que esto solo se puede lograr con "voluntad política", y que "nuestra propuesta en materia educacional asegura que sea pública, gratuita, laica y de calidad para todos, y esto se puede lograr siempre y cuando quienes tengan recursos, especialmente las empresas, paguen los impuestos que tengan que pagar".

Finalmente, Tomás Jocelyn Holt, declara que A nivel universitario, él fijaría los aranceles de las carreras de educación superior. "Y creo que las corporaciones universitarias no deberían estar formadas por empresas", precisa.

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