Carreras más baratas = menos acreditación
El sistema educacional chileno tiene fallas por donde se le mire, a los altos costos que cobran las instituciones de educación superior, se le suma la poca transparencia que existe respecto a la acreditación de las casas de estudios.
Al momento de analizar los aranceles que cobran las diferentes instituciones de educación superior en una misma carrera, las distancias son “aberrantes” por decirlo menos. El Informe Índices 2012, que elaboró el Consejo Nacional de Educación, es enfático: en las 20 carreras más demandadas hay entre un 74% y un 444% de diferencia en los valores de sus aranceles.
Programas con mayores diferencias
La carrera que presenta una mayor desproporción en su costo anual es Ingeniería en Construcción. La Universidad Central es la que tiene el arancel más alto de 2011, con $6,8 millones. Por su parte la U. Federico Santa María con sede en Talcahuano, es la más económica y el valor de la carrera alcanza $1.250.000.
La segunda que tiene grandes diferencias en sus valores es Ingeniería en Administración de Empresas. En la Universidad de los Andes el programa cuesta $ 3.861.999, un 370% más que en la UC de la Santísima Concepción, cuyo cobro anual es de $ 822 mil.
La tercera que completa el podio es Ingeniería Comercial donde existe una diferencia de un 306% entre el plantel más barato y el más caro. En la UC, el valor del arancel llega a los $ 4.470.000, mientras que en la U. Bolivariana sede Ovalle es de $ 1.100.000.
¿Por qué estas diferencias?
La distancia entre los valores de cada una de las instituciones es proporcional con los años de acreditación. De la totalidad de las carreras más baratas la U. de Aconcagua y la U. Miguel de Cervantes no han sido partícipes del proceso. La Bolivariana no obtuvo la acreditación, la U. Pedro de Valdivia la obtuvo sólo por un año (concluye en diciembre de 2011), mientras que la Arturo Prat y la Ucinf están acreditadas hasta fines de 2012. La U. de Los Lagos, UC de la Santísima Concepción, U. Federico Santa María y Usach son la excepción a la regla, puesto que, tienen entre tres y seis años de acreditación.
La contracara de la moneda la presenta la Universidad Católica, que tiene cuatro de las 20 carreas más cotosas y justamente es la que posee mayor cantidad de años de acreditación en todas las áreas: gestión institucional, docencia de pregrado, investigación, vinculación con el medio, docencia de posgrado e infraestructura y equipamiento. En total de las ocho casas de estudio que tienen los aranceles más elevados, seis tienen entre cuatro y siete años de acreditación.
Otro dato relevante que presenta el Informe Índices, es que de los 9.521 programas de estudio de 2011, sólo un 15% está acreditado. De estos, el 24% lo concentran las universidades, el 13% los institutos profesionales y el 2% los CFT.
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Carreras más baratas = menos acreditación
Publicado
por
Pancho Cuevas