Te presentamos el Managing Up: Cómo convertirse en el favorito del jefe y no perder la dignidad en el intento:
En EEUU existen empresas especializadas en relaciones laborales e incluso algunas carreras tienen en sus mallas curriculares este peculiar ramo incluído. Todo para garantizar el éxito de los trabajadores y ver traducido el esfuerzo en un mejor salario.
Dentro de las más valiosas estrategias laborales para mantener el trabajo, está este ingrato "arte" de manipular la relación con tu jefe, que traducido al español, "Managing Up" podría ser algo así como “Administración del Ascenso” o “Administración en pro del aumento”, por decir algo.
Penélope Trunk, dueña de la compañía Brazien Careerist que se dedica a enseñar los secretos del Managing Up, deja claro que esto se trata básicamente en entender a tu jefe, leer su comportamiento, sus gestos, saber lo que necesita y ser capaz de resolver sus necesidades antes de que él lo manifieste. En resumen, debes estár pendiente y concentrado en ser lo más asertivo en la relación.
Recetas para esta técnica hay miles, de hecho, forma parte de las mallas de prestigiosas universidades de USA y ha sido inspiración de muchos libros, pero hay 3 factores fundamentales a considerar en esta manipulación:
1- Adaptarse al estilo y fijarse en los detalles.
“Es indispensable analizar a quien está por sobre usted, aprender cómo le gusta relacionarse con sus empleados, si prefiere conversar cara a cara o hacerlo por correo, si le gustan las respuestas breves y precisas o si prefiere largas conversaciones”, dice Trunk.
2- Dar soluciones, no problemas y anticiparse a ellos.
“Para tomar el control de su relación con sus superiores es fundamental cumplir las tareas que le impone su jefe, llevar una agenda detallada de todas las reuniones que mantiene con él, mantener el pulso de los cambios de prioridades, prever problemas y ofrecer soluciones y, por último, estar siempre preparado para dar un informe sobre el estado de sus proyectos laborales”, dice Elster, una de las dueñas de K Squared Enterprises,
3- Hacerse visible, fingir que disfruta de su conversación y que todas sus ideas son geniales.
“La parte dura de esta tarea es tener tiempo todos los días para reunirte con tu jefe, unos 15 minutos de conversación en la semana es suficiente. Es importante esforzarse por mantener un trato amable y directo, aunque no esté de acuerdo con él y en lo personal no le agrade. También debe tener presente que algunos necesitan más atención y que debe tener cuidado con no aburrir ni hacerle perder tiempo. Hay que ir al grano de forma breve y sencilla, nada de lamentaciones o temas íntimos”, agrega desde Connecticut Bruce Tulgan, dueño de Rainmaker Thinking,
Si pones en práctica por unos días estos tres factores, de seguro tu jefe en algún momento te invitará a un café. Ahora, ojo, no nos hacemos responsables por pérdida irremediable de dignidad o aumento de peso en la conciencia.
Managing Up: Técnicas para ser el favorito del jefe
Publicado
por
Gabriela Aranguiz Vergara