Mucho se ha comentado de la posibilidad de que un número considerable de estudiantes haya perdido el año por las protestas, manifestaciones y gran cantidad de tomas producidas en las movilizaciones. Si esto ocurriera, sería la segunda vez en el mundo que pasa, lo cual no sería un buen registro ni para el estado, ni para los estudiantes que perderían el año, porque igual, en la mayoría de los casos, deberán pagarlo.
Corre el año 1957, las presiones sociales aumentan favoreciendo a toda la población de color en Estados Unidos de América, a tal punto que el presidente Eisenhower afirma que los ciudadanos tienen derecho a estudiar sin importar el color de su piel, sin discriminar entre colegios para blancos y para afro-americanos. El gobernador de Arkansas se opuso a esta medida, llegando a tal extremo de bloquear la entrada de los primeros estudiantes negros que lo intentaron. Ellos fueron conocidos como los “Little Rock Nine”. Las medidas tomadas por el gobernador en esos tiempos fueron la prohibición de asistir a clases, tanto para ellos, como para los que estaban en los colegios de la localidad, graciosamente, sin discriminar entre colores de piel y no. Los 9 niños querían ser linchados por esta situación y se tuvo que resguardar su vida con alrededor de 11 mil soldados. A esto se le denominó en la historia americana "The Lost year"
Este acontecimiento en la historia de USA fue el primer, y el último registro de la pérdida de un año escolar, aunque en diversos países se produjeron manifestaciones estudiantiles, ningunas conllevaron a un hecho tan importante como este. Inclusive, último registro de la “amenaza” de perder un año educativo fue en Irán, donde se protestaba contra el presidente de turno después de inmersión de los gobiernos americanos, lo cual quedó en nada con el pasar del tiempo.
Ahora en Chile ha comenzado a cursarse esta situación, en un país democrático, sin problemas tan grandes de racismo, ni de un presidente auto-impuesto y dictatorial, lo cual haría ilógica una medida de tal magnitud en el acontecer nacional. No solamente por la existencia del diálogo y de la forma casi utópica en que el gobierno cede, a esta arremetida social cuyo estandarte es la forja de las personas que serán el futuro del país. Lo cual se ha de ver con el acuerdo G.A.N.E. que, aunque no satisface las demandas de los estudiantes y profesores de la nación, sigue siendo una suma estratosférica la que se planea inyectar, inclusive, la nueva forma de regir el sistema educativo también es algo totalmente impensado años atrás.
Hoy lunes, en un par de horas más, el ministro Bulnes entregará a los estudiantes sus propuestas nuevas y modificaciones a las anteriores de cómo podemos enfrentar como país las demandas estudiantiles, las cuales, obviamente no satisfacen todas las medidas estudiantiles, secundarias, universitarias ni de los profesores, sin embargo, y actuando a conciencia ¿podríamos considerar lógico que se elimine el lucro de un día para otro? ¿Cuántos dueños de universidades aceptarían esto y no cerrarían sus casas de estudio de inmediato si se hiciera? Son preguntas que se deben responder antes de si quiera pensar en eliminarlo.
Otro punto a destacar que, considerando que se acogieran todas las demandas, estas no entrarán en vigencia ni que el congreso se pusiera de acuerdo totalmente (lo cual es más difícil aún que, la aprobación de lo exigido por los estudiantes), la entrada en vigencia de todas las reformas surta efecto antes de mediados del próximo año, por consiguiente, entre en activación el 2013. Por lo cual, si se esperara manteniendo tomas y huelgas de hambre, no serían uno los años perdidos, sino 2, hasta 3 y muchos morirían por inanición.
Chile ejerce la democracia, en donde todos deben ceder por una gran mayoría, el gobierno cedió y lo sabemos, nos tendió la mano y para algo que nos beneficia a todos, inclusive, lo volverá a hacer nuevamente hoy a las 18 horas. Sin embargo, ¿Nosotros no podríamos ceder en algo también? Porque, aunque las causas sean más que justas (porque no hay punto de discusión en que lo son), si no se cede en algo, se vienen 2 a 3 años perdidos, en los cuales aún se pagan el Aval del Estado, las matrículas universitarias y las mensualidades.
Si es que estás en una toma ¿Quieres volver a clases?
¿Qué esperas de los anuncios de hoy por parte del ministro Bulnes?
¡Esperamos tus respuestas!