Bill Gates se encuentra hoy en día liderando la Fundación Bill & Melinda Gates, la más grande organización no gubernamental del mundo. Desde ese lugar, el controvertible millonario se ha obsesionado con resolver las maneras de encontrar los dilemas energéticos que enfrenta el planeta.
Empresario, ex director y fundador de Microsoft, empresa conocida mundialmente por ser la productora del sistema operativo para computadoras personales más utilizado en el mundo, Microsoft Windows. Actualmente es el segundo hombre más rico del mundo, según la revista Forbes (2011), con una fortuna de 56 mil millones de dólares.
En una entrevista concedida a finales de mayo pasado al escritor Chris Anderson, durante la conferencia de negocios de la revista Wired, Gates afirmó que la energía nuclear es más segura que el resto de las fuentes de energía y criticó a los países más ricos por no gastar suficiente en investigación y desarrollo. Además señaló que colocar paneles solares en el techo de las casas no ayuda a disminuir las emisiones de CO2. “Es sólo bonito hacerlo”, dijo.
Cuando Chris Anderson, autor del best seller “The Long Tail”, le consultó por el desastre nuclear de Fukushima y la oleada de reacciones antinuclear que provocó en el mundo, Gates aseveró que: “Lo que pasó en Japón es terrible y hay muchas razones para haberlo evitado. Es una planta diseñada en los 60puesta en servicio en los 70
. La planificación de emergencias fue muy débil y el daño ambiental y humano fue claramente negativo”.
Para él comparar el desastre de Fukushima con la cantidad de personas que el carbón o el gas natural han matado por kilowatt, es mucho menor. El tema pasa porque “el carbón y el gas natural tienden a matar sólo unas pocas personas a la vez, lo cual es altamente preferida por los políticos”, señaló.
El argumento con que Gates está a favor de la energía nuclear es que se debe a la necesidad de los países más pobres de obtener energía a precios razonables para su desarrollo.
Para finalizar tiró una frase para el bronce “Si me dieran la opción de elegir entre escoger los próximos 10 presidentes o asegurarme que la energía sea amigable con el medioambiente y a un cuarto de su costo actual, optaría por esto último”, sentenció.