Práctica profesional: ¿Lugar de aprendizaje o mero trámite?

Esta etapa, por la que todos los que estudiamos alguna carrera de educación superior hemos tenido que pasar, ha significado, para algunos, una experiencia favorable y enriquecedora, en donde realmente consiguieron su objetivo: aprender y prepararse para la vida laboral; en otros, sólo representó un mal momento, digno de tirar al tarro de la basura.

Lo cierto es que el ideal de práctica profesional, es aquel lugar que te servirá como una escuela en la que debes absorber los máximos conocimientos posibles para estar preparado frente a lo que será la vida laboral como tal. Aquella errada creencia de que los practicantes están para “los mandados”, servir café y tantas otras trivialidades, es una de las falencias que el propio sistema ha creado y que, tanto las empresas como tú mismo, deben ayudar a eliminar.

Según Juan Pablo Swett, gerente general de Trabajando.com, “tanto las empresas como los estudiantes se deben tomar en serio la práctica profesional y no sólo la deben considerar como un trámite para poder titularse. Los jóvenes deben trabajar por llevar a la práctica los conocimientos que por años han adquirido. Por su parte, las empresas deben recibir y sacar el mayor provecho posible a estos nuevos profesionales que se incorporan por sólo un par de meses”.

Franco Cancino, estudiante de Psicología de la Universidad Técnica Federico Santa María, evidenció en el Centro de Inserción Laboral de la misma institución, una realidad que muchos de los jóvenes en la actualidad siguen. En dicho portal expresó: “la universidad me exige dos meses de práctica, pero la verdad que en ese período de tiempo apenas logras conocer la empresa y adaptarte a tu trabajo, por eso cuando me ofrecieron seguir trabajando bajo esta misma modalidad por tres meses más, acepté feliz”

Cancino, que finalmente terminó extendiendo su práctica, expresó que “siempre busqué una empresa que me entregará responsabilidades, que me permitiera ser un miembro activo de ella y de estar forma poder conocer desde adentro a la organización. Afortunadamente, mis objetivos se cumplieron con creces y siento que hoy soy un mejor profesional”

En conclusión, es éste justamente el objetivo de las prácticas: preparar de la forma más profesional posible al joven. Según datos de Trabajando.com, uno de cada cinco estudiantes chilenos se quedan trabajando en la empresa donde realizaron dicho proceso. Además, un 53% de los estudiantes chilenos creen que ésta es una instancia para aprender, por tanto, se le debe sacar el máximo provecho; el 16% cree que es un paso importante para la contratación.

Pero cuidado con la cifras, que en base a esta misma encuesta, un 11% de los estudiantes piensa que la práctica profesional no es más que un trámite para poder titularse, y que desean salir del “cachito” lo más pronto posible.

El consejo más adecuado, apunta a realizar las labores de practicante con la máxima responsabilidad, seguridad y dedicación posible, ya que, sin duda, puede representar un indicador importante en tu futuro laboral, quedándote en ella, o siendo una excelente carta de presentación para tus venideros puestos de trabajo.

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¿Tú que recuerdos tienes de tu práctica profesional? ¿Te quedaste trabajando ahí? ¿Te sirvió?

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